Comité para la abolición de las deudas ilegítimas

De cara a las inminentes elecciones al Parlamento Europeo y en la línea de la intención del voto, aparecen datos como estos en el portal de El Economista, una publicación poco o nada sospechosa de ser considerada de izquierdas: “En España, Vox resultó la tercera fuerza más votada en las regiones más pobres”, así como: “Un estudio del Ifo [1] alemán dice que si sube un 1% la pobreza, los partidos de ultraderecha escalan un 1,2% en voto”. La relación entre ultraderecha y pobreza salta, pues, a la vista.

Por toda Europa, el ascenso de partidos de corte ultraderechista, ultranacionalista e incluso de tendencia neofascista, es una realidad.

Por toda Europa, el ascenso de partidos de corte ultraderechista, ultranacionalista e incluso de tendencia neofascista, es una realidad. Desde los años 80 del pasado siglo ya empiezan a obtener escaños en los parlamentos nacionales y a nivel europeo (Jean-Marie Le Pen irrumpe en el Parlamento Europeo en 1984), lo que debería hacernos reflexionar acerca de que la situación actual viene de largo. Tras la crisis económica de 2008, los resultados electorales de estos partidos mejoran sensiblemente, siempre siguiendo la misma pauta: a mayor índice de pobreza, mejores son los resultados.

El caso argentino es paradigmático, la llegada al poder de Javier Milei llegó de la mano del descontento de la población, inmersa en una grave crisis económica que arroja cifras como un índice de pobreza mayor del 45% o una inflación Inflación Subida acumulativa del conjunto de los precios (por ejemplo, una subida del precio del petróleo, que conlleva luego un reajuste de los salarios al alza, luego la subida de otros precios, etc.). del 143% en 2023, datos del mismo mes en el que se celebraron las elecciones.

El caso argentino es paradigmático, la llegada al poder de Javier Milei llegó de la mano del descontento de la población

Hace unos meses, el periódico español La Vanguardia propuso a ocho analistas e investigadores de distintos campos responder a la pregunta: ¿qué sucedería si la extrema derecha gobernara en el mundo? Las respuestas no alientan el optimismo: en cuanto a la economía, menos crecimiento, más deuda Deuda Deuda multilateral La que es debida al Banco Mundial, al FMI, a los bancos de desarrollo regionales como el Banco Africano de Desarrollo y a otras organizaciones multilaterales como el Fondo Europeo de Desarrollo.
Deuda privada Préstamos contraídos por prestatarios privados sea cual sea el prestador.
Deuda pública Conjunto de préstamos contraídos por prestatarios públicos. Reescalonamiento. Modificación de los términos de una deuda, por ejemplo modificando los vencimientos o en relación al pago de lo principal y/o de los intereses. e inflación, menos comercio internacional y menos flujos financieros entre otras cosas, y en cuanto a los derechos y libertades la lista es desalentadora: retroceso en los derechos de las mujeres, las minorías étnicas, los colectivos LGTBI, migrantes, etc. aumento del racismo institucional, auge de los nacionalismos identitarios…

Realmente no es que sea necesario situarnos en escenarios probables cuando ya disponemos de situaciones reales en diversos lugares del planeta.
Ahora bien, ¿qué alternativas en cuanto a la lucha por revertir el proceso se están proponiendo en estos momentos? ¿existe un espacio organizado pensado para debatir en torno a la solidaridad entre los pueblos y cortar el paso al avance de la cadena ultraderecha-poder-dinero?

¿Qué sucedería si la extrema derecha gobernara en el mundo? Las respuestas no alientan el optimismo

Sí, existe.

Se le ha llamado la Iª Conferencia Internacional Antifascista y tendrá lugar muy pronto, entre los días 17 y 19 de mayo, en la ciudad de Porto Alegre, en Brasil. Las razones para apoyar la Conferencia son abrumadoras, casi sería mejor reformular la pregunta en los términos: ¿alguna razón para no apoyar esta iniciativa? Soy de la opinión (por mucho que intenten contarnos lo contrario) de que el 99% de la sociedad es antifascista, la inmensa mayoría tenemos razones de sobra para estar en contra, para organizarnos y para luchar desde la unidad. Démosle una oportunidad a lo que históricamente siempre ha funcionado frente al fascismo, la lucha unitaria capaz de abrir la senda contra todas las formas de explotación y opresión hacia las personas.

Tenemos una cita en Porto Alegre el 17 de mayo y allí estaremos, en el primer peldaño de una larga escalera que construiremos para, una vez más y siempre que sea necesario, llegar a lo más alto en busca de la dignidad de todas las personas, en busca de una vida que merezca la pena ser vivida.