Reseña del libro de Adolfo “Txiki” Muñoz: El modelo neoliberal vasco

2 de julio por Fernanda Gadea


Fuente: Portada del libro.

Como ya se anuncia en la presentación del texto, este libro publicado en 2024 [1] no es un trabajo académico sino un intento de poner el foco en la gestión política del PNV para llegar a una valoración holística y, por otro lado, en palabras del autor, “desmontar la propaganda oficial en la que los gobiernos han convertido sus actos y apariciones públicas.” El autor, Adolfo “Txiki” Muñoz Sanz (Mañueta 1959) comenzó a militar en el sindicato vasco ELA durante el franquismo y participó en el congreso de refundación del sindicato celebrado en 1976. Txiki ha sido Secretario General de ELA entre 2008 y 2019, ocupando antes diversas responsabilidades en la Federación de Servicios Públicos, como responsable comarcal de Gasteiz, como Secretario General de la Federación del Metal y también como Secretario Nacional de Negociación Colectiva. Así mismo, se licenció en Derecho por la UNED.

Articulado en cuatro partes, a lo largo de los 20 capítulos se analizan desde la UE y su marco original, hasta el conflicto en Cataluña, pasando por los recortes, las privatizaciones, la crisis del coronavirus, el cambio climático o el feminismo. Hay que mencionar también la importancia de los informes periódicos del sindicato ELA como fuente utilizada por Txiki para su documentación, además de las notas y reflexiones recopiladas desde los distintos medios de información.



 1 Unión Europea. Diseñada para unificar políticas neoliberales

El título en sí mismo supone toda una declaración de intenciones: la UE ha resultado ser una estructura institucional antidemocrática que favorece la expansión del neoliberalismo y la extrema derecha, todo ello con el apoyo de la socialdemocracia.
El texto comienza explicando el contexto aprovechado por la UE para implantar las bases de un neoliberalismo continental en el que la derecha política y económica se encuentran cómodas.
Empezando por la eliminación de barreras a la especulación Especulación Actividad consistente en buscar ganancias bajo la forma de plusvalía apostando por el valor futuro de los bienes y activos financieros o monetarios. La especulación genera un divorcio entre la esfera financiera y la esfera productiva. Los mercados de cambios constituyen el principal lugar de especulación. financiera y considerando los derechos sociales y laborales como un estorbo para el libre mercado, se desplegaron las herramientas que permitieron, tanto a la UE como a los gobiernos, abordar de común acuerdo la crisis de la deuda Deuda Deuda multilateral La que es debida al Banco Mundial, al FMI, a los bancos de desarrollo regionales como el Banco Africano de Desarrollo y a otras organizaciones multilaterales como el Fondo Europeo de Desarrollo.
Deuda privada Préstamos contraídos por prestatarios privados sea cual sea el prestador.
Deuda pública Conjunto de préstamos contraídos por prestatarios públicos. Reescalonamiento. Modificación de los términos de una deuda, por ejemplo modificando los vencimientos o en relación al pago de lo principal y/o de los intereses.
pública en 2010 [2] . A este conjunto de normas y directivas se le empezó a llamar “europeísmo”. Aquí ya no importaba qué partido estaba en el gobierno, algo que quedó claro en el conocido como “memorándum de entendimiento”.

Lo que había en el fondo del caldero era una guerra entre las élites económicas y políticas y las clases populares, como muy bien se puso de manifiesto en Grecia, a la vez que suponía un aviso a navegantes sobre las capacidades de la Troika Troika Troika : el Fondo Monetario Internacional, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo a la hora de chantajear a los pueblos.
Muchos son los párrafos dedicados a la crisis griega, aunque quizás se echa en falta una visión menos “benevolente” de la actuación de Yanis Varoufakis que, a mi entender, proyecta sombras más dignas de comentario que sus luces. El libro de Éric Toussaint “Capitulación entre adultos” [3] cuenta la historia real de lo acontecido en los ocho meses que duró la Comisión de la Verdad sobre la Deuda Pública Griega. Toussaint coordinó esta Comisión que elaboró dos documentos, el Informe Preliminar del Comité de la Verdad de la deuda pública griega y el informe Ilegitimidad, odiosidad e insostenibilidad del Memorándum de Entendimiento [4] así como abundantes documentos en los que demuestra que la alternativa a la capitulación era posible y la actuación de Varoufakis estuvo muy lejos de lo que la historia oficial se empeña en contar. [5]
En el caso español de la crisis de la deuda en 2010 y el rescate a la banca que llevó aparejado, Txiki se muestra bastante más belicoso, y a lo largo de siete páginas realiza un pormenorizado análisis que va desde la adopción del euro a la reforma de la Constitución con la modificación del artículo 135, que priorizó el pago de la deuda sobre cualquier gasto social [6], lo que vino a deteriorar más aún los maltratados servicios públicos del país
Se aborda también la problemática del Brexit: “Es conveniente prestar atención al Brexit y a la influencia que pueda tener en la UE. Una hipótesis es que la salida del Reino Unido refuerce las políticas neoliberales en las islas para convertir a Gran Bretaña en un país más atractivo para el dinero y las empresas. Sin descartar que, si se produce, pueda provocar una reacción de imitación en los miembros de la propia UE. Nadie pone en duda que la City londinense presionará para obtener más desregulación y beneficios fiscales. Habría que remontarse al thatcherismo neoliberal de la década de los 80 del siglo pasado para repasar los efectos que aquella estrategia tuvo en el desmantelamiento de las instituciones de solidaridad social.
La crisis interna en el partido conservador que provocó la salida de Boris Johnson y de Liz Truss no descarta que, quizás de manera no tan burda como la desarrollada por Truss, se profundice en esas políticas.”, el resultado electoral en las elecciones francesas de 2022: “Debe ser citado el buen resultado electoral de la Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon en las elecciones legislativas de 2022. El objetivo de la coalición que él encabezaba era defender la necesidad de “reorientar las políticas europeas y modificar las reglas y los tratados europeos incompatibles con nuestra ambición social y ecológica legitimada por el pueblo”. Defendía que existían reglas en la UE que “no estaban adaptadas a los imperativos de la urgencia económica y social” que defendía su programa y se planteaba una “ruptura concertada” y, si no era aceptada por las instituciones europeas -decía-, “aplicaremos en todos los casos nuestro programa a nivel nacional, asumiendo la confrontación con las instituciones europeas”. La voluntad popular expresada en las urnas no debía ser anulada por las leyes de la UE”.
Por último, se presta atención a la guerra en Ucrania y las decisiones adoptadas tanto por la UE como por el Estado español: “es obligado prestar atención a la crisis generada por la guerra en Ucrania, a sus derivadas y las decisiones adoptadas por la UE y el Estado español:

Es destacable que ante una guerra dentro de las fronteras europeas y con la amenaza del riesgo nuclear, la UE y sus estados miembros -al menos en sus manifestaciones públicas- hayan relativizado la función diplomática y mediadora, plegándose a los dictados de una OTAN Organización del Tratado del Atlantico Norte
OTAN
Este organismo asegura a los Estados europeos la protección militar de los Estados Unidos en caso de agresión, pero, sobre todo, ofrece a los Estados Unidos la supremacía en el bloque occidental. Los países de Europa Occidental aceptaron la integración de sus fuerzas armadas en un sistema de defensa puesto bajo el mando estadounidense, reconociendo de hecho la preponderancia de los Estados Unidos. Fue fundada en 1994 en Washington, y pasó a un segundo plano acabada la guerra fría. En el año 2002 se componía de 19 miembros: Bélgica, Canadá, Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Islandia, Italia, Luxemburgo, Noruega, Países Bajos, Portugal y el Reino Unido, a los que se sumaron Grecia y Turquía en 1952, la República Federal de Alemania en 1955 (sustituida por la Alemania unificada en 1990), España en 1982, Hungría, Polonia y la República Checa en 1999.
liderada por EEUU. La decisión de invadir Ucrania por parte de Rusia es totalmente rechazable, pero no debería llevar a la UE a renunciar a una política exterior propia, hasta el punto de que se haga aparecer cómo débiles a quienes defienden una negociación diplomática.

La OTAN, que había perdido mucho protagonismo tras la desvertebración de la URSS, ha aprovechado la ocasión para reivindicarse y orientar las políticas de sus miembros hacia la militarización. Entre esos estados, el español, que se ofreció para celebrar la cumbre en Madrid y cuyo presidente del Gobierno anunció, coincidiendo con el PP, que se aumentaría el gasto militar hasta el 2% del PIB Producto interno bruto
PIB
El PIB es un índice de la riqueza total producida en un territorio dado, estimada sobre la base de la suma de los valores añadidos.
. Justo el porcentaje demandado por la OTAN.
La concreción de esa decisión se plasma en los presupuestos de 2023 con un incremento del gasto militar del 42,5%. Más allá de las poses de unos y otros, no ha habido discrepancias entre el PSOE y U-P, toda vez que Yolanda Díaz afirmase, quitando validez a lo que había manifestado Pablo Echenique, que “conocían al completo la fórmula pactada con Hacienda” para incrementar ese gasto.

Las derivadas del conflicto militar son múltiples: pérdida de vidas humanas, crisis humanitaria de refugiados, riesgo nuclear, especulación financiera y de las multinacionales en sectores que afectan a necesidades básicas, crisis de suministros y alimentaria, dependencia energética, crisis de deuda pública, aumento de la inflación Inflación Subida acumulativa del conjunto de los precios (por ejemplo, una subida del precio del petróleo, que conlleva luego un reajuste de los salarios al alza, luego la subida de otros precios, etc.). y de los tipos de interés Interés Cantidad pagada como remuneración de una inversión o percibida por un prestamista. El interés se calcula sobre la base de la cantidad de capital invertido o prestado, de la duración de la operación y del último tipo aplicado en ese momento. , más gasto militar… Todo esto sucede cuando las consecuencias de la Covid-19 aún no se habían superado.

Los elevados precios de la energía son, en parte, anteriores al conflicto bélico.
Para entonces el precio de la electricidad había alcanzado los 200 € MWh. En el aumento posterior tienen influencia, además de la escasez de suministros, el componente especulativo por parte del poder financiero y las grandes empresas energéticas. Ante ese hecho la UE carece de una política común y EEUU hace negocio con la guerra, cobrando la energía que vende a la UE a precios astronómicos. Es de suponer que hará lo mismo con el armamento.”

 2 Homologación entre izquierda y derecha. La práctica neoliberal es el común denominador

El análisis político global hace referencia en este capítulo a la estrategia de la izquierda institucional, tanto en el Estado como en Euskadi, y los efectos a futuro.

La izquierda mantiene, por una parte, una retórica atractiva que recoge todos los contenidos reivindicativos imaginables; por otra, fija unas alianzas incompatibles con esos contenidos y, por último, se certifica en las instituciones aceptando que los límites a la política los establezca el neoliberalismo. Txiki

Txiki parte de la convicción de que no es posible recorrer el camino hacia unas políticas progresistas-socialistas al mismo tiempo que se refuerzan los valores neoliberales, quedando patente la falta de conexión entre las políticas institucionales y las demandas del pueblo: “Durante estos últimos años se ha producido una homologación entre la derecha y la izquierda institucional al aceptar ésta última que la práctica política en las instituciones sea neoliberal, una práctica en la que, con pequeños matices, se integra la práctica totalidad de la representación partidaria institucional. La izquierda mantiene, por una parte, una retórica atractiva que recoge todos los contenidos reivindicativos imaginables; por otra, fija unas alianzas incompatibles con esos contenidos y, por último, se certifica en las instituciones aceptando que los límites a la política los establezca el neoliberalismo. Esta conclusión debe
ser razonada y para hacerlo es preciso -igual que se hace con la derecha- trascender la propaganda
política y prestar atención a los contenidos de los acuerdos de gobernabilidad que apoya esa izquierda. No a lo que dicen que son, sino a lo que de verdad contienen.”
Describe de manera crítica los acuerdos en los que la izquierda institucional ha participado, tanto a nivel estatal como autonómico, en Euskadi y Navarra: Fondos UE “Next Generation” [7] , apoyo a las reglas de estabilidad presupuestaria, política fiscal, derogación (mejor dicho “no” derogación) de la reforma laboral que inició el Partido Popular y la reforma de las pensiones y el apoyo a las bases de una futura Ley de Educación en Euskadi que no se corresponde con lo que previamente se había firmado.
Seguidamente, se abren cuatro apartados más en los que se abordan:

• la evolución política de Unidas-Podemos (desde los orígenes de Podemos en las acampadas del 15M hasta su fragmentación ocho años más tarde, añadiendo un crítico retrato del PSOE y su actual secretario general Pedro Sánchez, así como de la vicepresidenta Yolanda Díaz)

• la certificación institucional de EH-Bildu sin necesidad de apoyos sindicales de ELA o LAB: “Muchos confiaron entonces que una vez resituada la estrategia en planteamientos estrictamente civiles, el proyecto político se orientase hacia un programa de izquierdas, alternativo y de contrapoder, que optara por disputar a la derecha vasca el espacio abertzale. La orientación política de la denominada izquierda abertzale, desgraciadamente, no ha sido esa”.

• el papel alternativo sindical y social: “El papel que la izquierda institucional reserva para la izquierda social y sindical es, básicamente, que se deje conducir y renuncie a desarrollar pensamiento y acción Acción Título mobiliario emitido por una sociedad de acciones. Este título representa una fracción del capital social. En particular otorga a su titular (el accionista) el derecho a percibir una parte de los beneficios distribuidos (el dividendo) y de participar en las asambleas generales de la empresa. política y social propia. La reacción ante las críticas que recibe por los acuerdos en que participa es de intolerancia, pretendiendo sustituir el fondo de los debates -la sustancia- por el mero tacticismo. Rehúye su responsabilidad a la hora de ofrecer a las clases populares una alternativa de emancipación, renunciando, incluso, a desarrollar una pedagogía que conlleve algún nivel de compromiso. Conocen y comparten los límites impuestos en los acuerdos de gobernabilidad, que impiden cualquier guiño a las organizaciones de clase.”

• la satisfacción de la derecha con la evolución de la izquierda institucional: “Se puede afirmar que la derecha vasca, en la actual coyuntura, ha consolidado su modelo. Los partidos sistémicos observan la evolución programática de la izquierda institucional con indisimulada satisfacción. Es normal que el PNV esté tranquilo y saque conclusiones de los acuerdos en los que participan EH Bildu y Unidas-Podemos en Madrid, la CAPV y Nafarroa. Esos acuerdos tienen una base común: no cuestionan el modelo de sociedad impuesto por la derecha. Esta práctica se desarrolló en primer lugar en Nafarroa para, posteriormente, aceptando la interpelación que durante años les había realizado el PNV, extenderse a la CAPV.”

Estas palabras de Txiki ponen de manifiesto su percepción de la realidad: “Lo que sí se puede afirmar es que, sin oposición a las políticas económicas y sociales que impone la derecha, solo quedan las políticas neoliberales, y que de impulsar a la confrontación democrática con el Estado solo queda gestionar la involución neocentralista con un autonomismo menguante como única referencia. Sin pisar la calle no hay cambios.”

 3 Organización. Instrumental a la vez que imprescindible

La importancia de organizarse se pone de manifiesto, desde lo político hasta lo social, sin olvidar el mundo sindical y de las organizaciones, a la hora de relacionar la programación sobre lo que se pretende hacer con las fuerzas de las que se dispone. Así mismo, Txiki señala la necesidad imperiosa de contar con la militancia para abordar proyectos que tengan como finalidad el cambio social o político.
En palabras del autor: “Para las organizaciones alternativas la militancia pasa a tener la misma importancia que el programa, de tal manera que este se puede considerar papel mojado si no cuenta con personas militantes que hagan suyo el compromiso de trabajarlo en sus respectivos ámbitos de intervención… sin base militante no es posible construir una izquierda alternativa, pudiendo afirmarse que la salud de los proyectos alternativos la determina su solidez o endeblez organizativa.”
Al mismo tiempo, y a través del símil del sindicalismo, plantea las movilizaciones y la huelgas como instrumentos indispensables en la consecución de los objetivos que los programas de lucha contra la precariedad o reparto de la riqueza necesitan.
El hecho de movilizarse trae aparejada la posibilidad de juntarse físicamente y confluir en espacios diferentes a los de las reuniones o actos de cada organización, algo que aumenta las posibilidades de establecer sinergias entre los colectivos, ganar adhesiones para la causa y, por supuesto, regenerar los discursos y revalorizar la lucha colectiva.
El sindicalismo reivindicativo responde así al tira y afloja constante entre la clase empresarial y la trabajadora; el neoliberalismo económico y político intenta expulsar por todos los medios a los representantes sindicales “molestos” de los centros de trabajo para evitar el multilateralismo en todo lo que afecta a las condiciones laborales de la clase trabajadora.
En todo este asunto, la formación es un factor clave. Formación de cuadros y militantes que analicen las prácticas neoliberales para debatir estrategias desde una perspectiva política capaz de consolidar los proyectos: “Por encima de coyunturas y urgencias precisa de tiempo y dedicación de medios humanos. Formación con cuadros y militantes para analizar las estrategias del neoliberalismo, para debatir las estrategias de la propia organización, donde se cuente, además, con mecanismos de aprendizaje para que esos cuadros sean eficaces en el conocimiento y manejo de lo que necesitan para ser útiles en sus respectivos ámbitos. Todo ello sin relativizar una perspectiva política que dé consistencia al proyecto.”

 4 Apoyo a los recortes

En esta segunda parte se abordan los ámbitos de intervención en la gestión política del PNV.
Mientras que la derecha saca muy buen provecho de sus mayorías en los gobiernos y parlamentos, la izquierda institucional no suele hacer lo mismo, no llega a modificar nada de manera estructural. En el mejor de los casos, su paso por los gobiernos no suele ir más allá de dejar las cosas casi como estaban, permitiendo a la derecha que, a su vuelta, siga actuando igual: “La derecha política ha aprovechado sus mayorías en gobiernos y parlamentos; la izquierda institucional no. La característica esencial de las reformas y ajustes de la derecha es que son claros, duros y sin matices; alteran los elementos que afectan a la distribución de la riqueza y colocan al capital en mejor posición para acumular riqueza y lograr más poder. Para comprobarlo basta repasar una a una las reformas y ajustes realizados durante la crisis de 2008: las reformas laborales, de pensiones, la del sector financiero, del mercado eléctrico, del urbanismo y la vivienda, los presupuestos y la fiscalidad, etc. La característica del paso de la izquierda por los gobiernos, sin embargo, se concreta en una actuación timorata, tibia, justificativa con lo que la derecha le había dejado y con mensajes ambiguos para no hacer lo que se espera de ella, dando continuidad a las políticas de la derecha. No modifica nada estructural. En el mejor de los casos, el resultado de su paso por los gobiernos es que las cosas queden prácticamente como estaban para que, cuando vuelva la derecha a los gobiernos, siga actuando en la misma dirección. Cuando el PP llegó al Gobierno le costó tres meses hacer la reforma laboral, y menos de un año cambiar el mercado eléctrico. El PSOE y Unidas-Podemos, después de tres en la Moncloa dejan como estaban temas esenciales. La pregunta que debemos hacernos cuando gobierna la izquierda es ¿qué se recupera en términos estructurales de lo que deshizo la derecha cuando gobernó?”

“La pregunta que debemos hacernos cuando gobierna la izquierda es ¿qué se recupera en términos estructurales de lo que deshizo la derecha cuando gobernó?” Txiki

A nivel nacional es importante recordar la función que otorgó el Partido Popular a los ajustes estructurales durante la crisis de 2008 [8] . Se trataba de políticas “patrióticas” porque “unificaban el Estado español”, ya que lo que aprobaban en Madrid se aplicaba por igual en todo el Estado: “El PNV ha sido un actor principal a la hora de dar estabilidad a los gobiernos del Estado para que las aplicasen, no le importaba tanto que el PP liderase esas políticas como que la ciudadanía vasca percibiese su colaboración con el PP para ayudarle a “unificar España”. Conviene tener en cuenta ese hecho, ya que en 2022 el PNV representa un obstáculo para que aquellas reformas puedan ser derogadas o revisadas. Su posición en la última reforma laboral de Sánchez no ha sido una excepción.” [9]

Analiza el papel desempeñado por el PNV en cada una de las reformas y ajustes aprobados en el Estado durante la crisis de 2008: la reforma de la Constitución, las leyes de ajustes presupuestarios, las reformas laborales y de pensiones, la reestructuración financiera, la política fiscal aprobada en las instituciones vascas, la política presupuestaria, la privatización de la economía, etc. En cuanto a la reforma de la Constitución, señala el voto en contra del PNV a la misma, así como la connivencia con la Troika [10] y la negativa, por parte de los partidos que votaron a favor, de llevar a cabo una auditoría para conocer el origen y la naturaleza de la deuda. “Aun habiendo votado en contra, el PNV ha apoyado todos los años la concreción del significado de esa ley (el establecimiento del techo de gasto, el límite de déficit y de deuda pública), votando afirmativamente cuando esas materias se aprobaban en el Congreso español y aplicando de forma ortodoxa su contenido. Lo ha hecho defendiendo, en una situación de grandes necesidades sociales, incluso, que los presupuestos se cerrasen con superávit. Ejemplo de esa opción por el superávit son los remanentes de los últimos años que, como consecuencia de las leyes citadas, no se pueden destinar al aumento del gasto social en la medida necesaria. En Nafarroa ha sucedido lo mismo tanto con Uxue Barkos como con María Chivite.

Pedro Azpiazu, consejero de Hacienda del Gobierno Vasco, defendió sin miramientos que “la regla de gasto es una camisa de fuerza, pero estoy de acuerdo con ella”. Sus declaraciones y las del Lehendakari apoyaban la lectura más restrictiva que cabía hacer de esas normas estatales. No planteaban problema alguno en unificar las políticas vascas con las estatales.”
Las reformas laborales llevadas a cabo por José Luis Zapatero (PSOE) y Mariano Rajoy (PP) fueron apoyadas por el PNV durante la crisis de 2008. Dos años más tarde, en 2010, su abstención en la votación a la reforma laboral [11] posibilitó su aprobación; en caso de haber votado en contra, la reforma no se habría aplicado. En la posterior reforma del PP en 2012, su voto fue en contra, pero a esa altura ya no era para nada decisiva su actuación, la derecha de Rajoy gozaba de mayoría absoluta en la cámara de los diputados.
“Al llegar el PP al Gobierno solo le costó tres meses aprobar una nueva reforma laboral más dura. Ya se ha dicho que la derecha aprovecha muy bien el tiempo. Rajoy la impuso despreciando, incluso, la mesa de diálogo social. La acordó solo con la CEOE.
Esas reformas destruyeron muchos derechos: facilitaron y abarataron los despidos individuales y colectivos; debilitaron el derecho a la negociación colectiva al eliminar la ultraactividad de los convenios colectivos y priorizar el convenio de empresa sobre el de sector, además de facilitar el descuelgue. La “estatalización” de la negociación colectiva aprobada por el PSOE hacía suya una vieja aspiración de CCOO, UGT y de la patronal para propiciar el “monopolio de la negociación colectiva, otorgando a la negociación estatal la facultad de prohibir o limitar el derecho a la negociación colectiva en niveles sectoriales inferiores al estatal.
El objetivo de las reformas era devaluar salarios, empobrecer las condiciones de trabajo y dificultar la capacidad de negociación colectiva de la clase trabajadora. Las reformas posibilitaron una contratación a la carta, facilitaron la movilidad funcional y geográfica de quien tenía empleo y, en el cese -tanto individual como colectivo-, optaron por un despido fácil y mucho más barato sin intervención de la administración, eliminando, además, el abono de los salarios de tramitación. Con esas premisas el resultado solo podía ser un trabajo más deshumanizado.”
Txiki recurre muy acertadamente al símil cinematográfico con la película de John Ford de 1941 “Qué verde era mi valle” cuando, después de haber sido despedido, uno de los trabajadores ofrecía una explicación a los motivos de su despido: “Estamos demasiado bien pagados para competir con hombres más desesperados”. En tiempos de crisis y paro, quien no tenga ni para comer se verá obligado a aceptar cualquier tipo de condiciones de trabajo, tanto en el siglo XIX como en estos mismos momentos.
Las reformas laborales han resultado ser en este país la genuina aplicación del I+D+i empresarial o cómo aumentar la competitividad a base de bajar los sueldos. Las recurrentes reformas han favorecido a un tipo de casta empresarial más acostumbrada a recibir oportunidades legislativas que a realmente invertir en su negocio, una clase empresarial más empeñada en conquistar al poder político de turno para obtener ventajas y privilegios. En cuanto a la reforma laboral de 2022 del PSOE y Unidas-Podemos, más allá del esperpento de la votación en sí, se podrían poner de manifiesto algunos elementos, como la nula credibilidad del Gobierno de Pedro Sánchez, capaz de arrimarse a la derecha en cuanto le conviene [12] ; todo el mundo debería tener claro que los puntos esenciales de la reforma del PP no se iban a modificar.

“Las recurrentes reformas han favorecido a un tipo de casta empresarial más acostumbrada a recibir oportunidades legislativas que a realmente invertir en su negocio, una clase empresarial más empeñada en conquistar al poder político de turno para obtener ventajas y privilegios.” Txiki

En el caso de Unidas-Podemos la situación era más grave aún, ya que formar parte del Gobierno le condicionaba a revisar todas sus posiciones, es decir, a no cumplir ninguna de sus promesas electorales. Su propuesta inicial era “derogarla”, un poco más tarde pasaron a decir que se debían “cambiar los aspectos más duros” y finalmente terminaron por aceptar la exigencia de la UE de no hacer nada sin el acuerdo previo de la CEOE. El periódico económico Expansión llamó la atención sobre que la reforma fuese pactada, subrayando que “no generará contestación social” [13] y el sindicato ELA llevó a cabo una campaña en 2021 interpelando tanto al PNV, EH Bildu y Elkarrekin Podemos para que “no vendieran” a la clase trabajadora vasca. [14]
Se llega así al apartado dedicado al presente y futuro de las relaciones laborales.

“Es preciso prestar atención a cómo la legislación laboral se va posicionando ante las prácticas de las empresas para comprobar si prevalece un nuevo “laissez faire, laissez passer” del siglo XXI, defendido por el neoliberalismo, o si se introducen regulaciones que limiten o prohíban la explotación y extensión del trabajo indigno.”

El autor presenta ejemplos de modalidades de precariedad laboral en las que las empresas priorizan la distribución on-line copiando modelos empresariales al estilo Amazon, Inditex, El Corte Inglés, H&M, Cortefiel, etc. Otras empresas han hecho lo mismo en el transporte de mercancías, imponiendo que sus trabajadores se den de alta como autónomos, transfiriéndoles así cualquier responsabilidad ante los riesgos de su trabajo. La huelga llevada a cabo en el sector del transporte por los autónomos en marzo de 2022 ante el incremento de los precios de los combustibles, dejó al descubierto la problemática oculta en estos insidiosos sistemas de trabajo, en los que cualquier perjuicio repercute en los niveles inferiores de la cadena productiva, quedando los beneficios para las grandes empresas y las pérdidas solamente para las personas obligadas a ser “emprendedoras”.

“Esas estrategias tienen un coste social -no solo laboral- impresionante, entre otras cosas, porque en un mercado de libre competencia tienden a ser imitadas por otras empresas. Las que pueden. Este sistema de producción-transporte-consumo, aunque se perciba menos, no se limita solo al sector del comercio. El sector financiero lleva tiempo desarrollando la banca on-line como estrategia preferente para ahorrar costes y aumentar beneficios, procediendo al cierre masivo de oficinas y al despido y/o amortización de miles de trabajadores y trabajadoras. Su único compromiso es con sus accionistas. Todo esto sin entrar a valorar lo que pueda suponer para el trabajo digno la robotización de muchos procesos productivos.

Es evidente -y descorazonador- observar cómo a los partidos sistémicos, entre los que está el PNV, todo esto no les preocupa. Citando a Byung-Chul Han [15], se les debe acusar de construir un modelo de sociedad donde “en la lucha por la supervivencia no se plantea -en la práctica- la cuestión de la calidad de vida”.

En el espacio dedicado al Pacto de Rentas, lo compara con los Pactos de la Moncloa [16] por su pretensión de constituir “acuerdos políticos frente a la crisis”:
“Cualquier motivo es bueno para insistir en la devaluación Devaluación Modificación a la baja del tipo de cambio de una moneda frente a otras divisas. salarial. Los precios de la energía ya aumentaban durante el año 2021 con un sistema de fijación de precios de la electricidad que favorecía el enriquecimiento injusto de las multinacionales, sin que el Gobierno español y la UE le hiciesen frente con cambios estructurales en la política. La guerra en Ucrania ha favorecido un mercado especulativo en diversos sectores (energía, alimentación, etc.), siendo las grandes beneficiadas de esa especulación en el Estado español las multinacionales de la energía.”
Y finaliza este capítulo 4 analizando la actitud del PNV en la reforma de las pensiones.
Básicamente: vota sí o se abstiene cuando sus votos son necesarios para la aprobación y no cuando el PP no necesita ayuda, se basta solo, al estilo de la reforma laboral.

“Las reformas del PSOE y del PP supusieron un duro golpe a las pensiones públicas.
Entre otras cosas, alargaron la edad de jubilación hasta los 67 años; aumentaron de 15 a 25 los años del periodo de cómputo para hallar la base reguladora; establecieron el “factor de sostenibilidad” para que de manera automática se pudiesen recortar las pensiones en el futuro; eliminaron la actualización automática de las pensiones según el IPC; retrasaron el acceso a la jubilación voluntaria, convirtieron en algo excepcional lo que se conocía como contrato de relevo, etcétera.”

Al mismo tiempo, los planes privados de pensiones tomaban impulso a través de las ventajas de todo tipo con las que contaban, especialmente las fiscales, pensadas para favorecer a la banca privada su expansión en ese emergente nicho de mercado, primando a las rentas altas que los contrataban una importante reducción en los impuestos aplicables a esos fondos.

Las pensiones son el “tema estrella” de recorte en el Estado, se sabe en Bruselas y en el estado español y se discute apasionadamente a lo largo y ancho del país, siendo la negociación determinante llevada a cabo en secreto por el Gobierno con Bruselas, como consecuencia de la condicionalidad de los Fondos UE. Cambiar “reforma” por “modernización” no es sino un eufemismo más para no tener que hablar de “recortes”.

“Los pasos dados por el Gobierno español recuerdan demasiado a lo que se vivió en 2010, 2011 y 2012. Entonces el PP llegó a votar en contra de la reforma de Zapatero argumentando que se oponía al “recorte de las pensiones”. Una vez que llegó al Gobierno no tardó mucho en dar a las pensiones otra vuelta de tuerca, aprobando otra reforma aún más dura. Nada hace pensar que no nos encontremos en una situación similar, de hecho, el PP ha anunciado que cuando recupere el Gobierno continuará con las reformas y los ajustes. Y lo hará, si es preciso, con Vox.”

 5 Reforma Financiera. Fin de las Cajas y privatización de Kutxabank y CAN

Durante la crisis financiera de 2008, el PNV apoyó tanto al PP como al PSOE a la hora de reestructurar el sistema crediticio-financiero en el Estado. A tal efecto, se destinaron 95.000 millones de euros de dinero público para rellenar el agujero, eso sí, a cambio de la imposición de severos ajustes sociales y profundas reformas. El resultado de todo ello fue la desaparición casi todas las Cajas de Ahorro en el Estado, incluidas las vascas.

Dos fueron los argumentos esgrimidos para la operación: la crisis de la deuda y el exceso de confianza de las Cajas en el mercado inmobiliario. Nadie llegó a asumir ningún tipo de responsabilidad ni ante el descontrol del sistema financiero, ni por el negacionismo exhibido ante la “burbuja inmobiliaria Burbuja inmobiliaria Una burbuja inmobiliaria es una burbuja especulativa en el mercado inmobiliario en su conjunto, caracterizada por un rápido incremento en el precio de los bienes inmobiliarios. Esto se traduce en una significativa y persistente separación entre los precios de los inmuebles y la variación de sus determinantes económicos fundamentales, como salarios o rendimiento de los alquileres. ”. [17]

Como resultado de los procesos sin precedente de fusión y privatización en el sistema financiero de la UE en su totalidad, el número de bancos ha quedado reducido a la mínima expresión, produciéndose al mismo tiempo una mayor dependencia de muchos partidos políticos con respecto a la banca privada. En el caso de España, nos encontramos con un escenario histórico: el poder fáctico de la banca.

La influencia del poder económico se deja ver en multitud de esferas: la judicatura, los sindicatos, las empresas y cómo no, la política. El apoyo y el silencio político están en venta, y parece que no pasa nada. En el Estado español todas las formaciones políticas apoyaron la eliminación de las Cajas, que pasaron a convertirse en bancos; en el caso de Euskadi, Bildu tiene pendiente una explicación a su falta de oposición en la desmantelación de las Cajas Vascas, algo que se pagó muy caro: privatización de Euskaltel, cierre de oficinas y la consiguiente destrucción de empleo, cobro de comisiones, desinversión de Kutxabank en proyectos industriales, etc.

El PNV, por su parte, renunció a un modelo financiero capaz de poner la capacidad de ahorro de la sociedad vasca al servicio de las necesidades crediticias de la economía real, sobre todo en el caso de las medianas y pequeñas empresas y la ciudadanía en general. Se convirtió en el responsable máximo de aquellas decisiones y arrastró detrás suyo a todos los partidos políticos.

“La prioridad del PNV era atraer a las élites políticas de los partidos para que su proyecto no fuese discutido en las instituciones. Pensaron que si las direcciones de los partidos estaban de acuerdo no había razón alguna para atender a nadie que lo discutiese desde la sociedad organizada. Todas las decisiones se adoptaron con un nivel de opacidad propio de sociedades secretas”. [18]

El PNV fue adaptando progresivamente sus argumentos, desde la inicial negación de que el objetivo fuese la privatización, hasta una posterior argumentación en cuanto a defender el “arraigo”, explicando que estaba garantizado si la mayoría de las acciones permanecían en manos de las Fundaciones de las antiguas Cajas. Atrás había quedado lo de no privatizar.

 6 Privatización. Un mercado sin límites que deshumaniza todo

A través de varios ejemplos, se muestra la connivencia que existe entre empresarios y políticos en cuanto a su defensa de intereses comunes. Concretamente, entre Iberdrola, la compañía eléctrica, y el lehendakari Urkullu, del PNV.

Pero los ejemplos de privatización son muchos, aunque la información permanezca soterrada: falta de inversiones y presupuestos adecuados en el sector público, que favorece al sector privado, permitiéndole ocupar los espacios que no cubren los gobiernos. Las necesidades mal cubiertas desde lo público se convierten en un reclamo para desarrollar proyectos privados.
El fenómeno de las “puertas giratorias” en el estado español posee una incidencia considerable: en los gobiernos de Felipe González, José Mª Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero, tres de cada diez ministros dejaron la política al cesar sus cargos embarcándose en actividades de la empresa privada, es decir, pasando del Consejo de Ministros al consejo de administración.

También en Hego Euskal Herría existen “puertas giratorias” en muchos sectores. La Diputación Foral de Araba nombró a Iñaki Artaza director de Innovación, Sistemas de Gestión y Evaluación del Departamento de Políticas Sociales de la Diputación. Una de sus responsabilidades es diseñar la atención de las personas mayores en las residencias. Hasta ese nombramiento, Iñaki Artaza desempeñó el cargo de director en la Sección de Residencias del Grupo IMQ Igurco, la empresa que más residencias privadas gestiona en la Comunidad y que ha extendido su ámbito enormemente. No resulta fácil separar su procedencia y el nombramiento público de las decisiones que se toman en este sector, así como las que se están preparando para el futuro. Y lo mismo encontramos en el sector educativo, energético, sanitario, etc.

 7 Fiscalidad. Al servicio de las rentas altas, del capital y empresariales

Treinta años después de acabar la II Guerra Mundial triunfaron las tesis avaladas por Arthur Laffer, cuya teoría explicaba con demasiada simpleza que “se recaudaba más si se bajaban los impuestos”. Las teorías simples calan rápido en la sociedad, sobre todo si no se encuentra protegida con referencias sociales alternativas y políticas sólidas. La “Curva de Laffer” [19] fue adoptada por Ronald Reagan y Margaret Thatcher a la hora de poner en marcha las reformas fiscales pensadas para beneficiar a los más ricos y a las grandes empresas. Este argumento falaz esconde en realidad un tipo de fiscalidad regresiva a través de una gráfica que relaciona impuestos y recaudación fiscal, llegando a la conclusión de que aumentando los impuestos se frena la recaudación y el crecimiento de la actividad económica, ya que desincentiva el consumo y la inversión privada. Pero no fueron solamente ellos los impulsores de la desfiscalización del capital, sino otras fuerzas de la derecha, y también de la izquierda, que se dejaron llevar por el dumping fiscal de algunos países.

El ataque hacia una fiscalidad progresiva estaba servido y la socialdemocracia se hizo eco de la propuesta: “La fiscalidad revela la impronta neoliberal del PNV, máxime si se tiene en cuenta que sobre ella las instituciones vascas tienen más competencias que en otras materias. Allí donde el PNV decide, la política es más neoliberal que la que se aprueba en otros lugares de Europa y hasta del propio Estado. El PNV ha decidido, usando como excusa la globalización Globalización (ver también Mundialización)

Origen y sentido de este término anglosajón: en inglés, la palabra «global» se refiere tanto a fenómenos que interesan a la (o las) sociedad(es) humana(s) a nivel del globo como tal (es el caso de la expresión «global warming» que designa el efecto invernadero), como a procesos que poseen la característica de ser «globales» únicamente en la perspectiva estratégica de un «agente económico» o de un «actor social» preciso. En lo que estamos viendo, el término «globalización» nació en las bussiness schools norteamericanas y reviste el segundo sentido. Se refiere a los parámetros pertinentes de la acción estratégica del gran grupo industrial. Lo mismo sucede en la esfera financiera. A la capacidad estratégica del gran grupo de adoptar una aproximación y una conducta «globales». En un debate público, el patrón de uno de los mayores grupos europeos explicó, en sustancia, que la «globalización» representa «la libertad para su grupo de implantarse donde quiera, cuando quiera, para producir lo que quiera, aprovisionándose y vendiendo donde quiera, y en donde tenga que soportar las menores obligaciones posibles en materia de derechos laborales y convenciones sociales» (extraido de Chesnais, 1997[a]).
, poner la fiscalidad al servicio de las rentas altas. Ha hecho suyos los tópicos fabricados por la gran industria que asesora a las grandes empresas y a los gobiernos para desfiscalizar a la riqueza, afirmando que la rebaja de los impuestos al capital nos beneficia a todos y todas.”

“Donde el PNV decide, la política es más neoliberal que la que se aprueba en otros lugares de Europa y hasta del propio Estado.” Txiki
Derecha e izquierda institucional se homologan en práctica fiscal, lo que supone una pérdida de referencias alternativas. Por otro lado, la fiscalidad deja de ser objeto de debate y los acuerdos de gobernabilidad a los que se incorpora la izquierda no llevan apareados ningún tipo de cambio: “La renuncia de la izquierda tiene efectos demoledores. No hay pedagogía para alimentar una cultura fiscal alternativa. Ese trabajo esencial queda para que sea desarrollado -en exclusiva- por una parte, del sindicalismo reivindicativo y algunos movimientos sociales que actúan sin hipotecas partidarias. Esa renuncia de la izquierda institucional supone un vacío de representación en las instituciones hacia esas propuestas. En la práctica no existe una dialéctica de compromiso entre esa política institucional y la sociedad movilizada en clave alternativa; no existe y, por supuesto, la derecha -en nuestro país el PNV- lo sabe.”

A través de Thomas Piketty, Emmanuel Saez y Gabriel Zucman, se propone una enmienda a la fiscalidad neoliberal: “Thomas Piketty constata en su libro “Capital e Ideología” que existe un relato dominante y hegemónico que defiende el derecho de propiedad con cada vez menos obligaciones sociales. Lo atribuye a un discurso meritocrático y proempresarial que justifica cualquier decisión que beneficie esos derechos. Sostiene Piketty que es egoísmo de clase. Emmanuel Sáez y Gabriel Zucman plantean en su libro “El Triunfo de la injusticia” la misma tesis, acompañando sus conclusiones y propuestas con datos sobre lo que ha sucedido en la fiscalidad en EEUU, y advirtiendo que sus conclusiones se pueden extrapolar a las conocidas como “democracias occidentales.

Piketty, Saez y Zucman comparten reflexiones que la izquierda en su conjunto está obligada a tomar en consideración. Tienen interés en señalar que sus posiciones no son “revolucionarias”, que podrían ser consideradas como pragmáticas, pero que chocan con el dominio que el dinero ejerce en las estructuras políticas que deciden la fiscalidad. Explican que los cambios históricos se producen cuando la evolución del pensamiento colectivo y la lógica de los acontecimientos van de la mano. Piketty no limita su análisis al ámbito electoral, institucional y de partidos; insiste en su libro en que el combate hay que darlo en el terreno de las ideas, con la participación de militantes, sindicatos, medios de comunicación, intelectuales, etc. Lo considera imprescindible para desmontar el sistema de creencias que a lo largo de muchos años ha consolidado el neoliberalismo. Piketty subraya que no es probable que resurja una coalición igualitaria sin una redefinición radical de su base programática, ideológica e intelectual.”

Si se exportaran las conclusiones de los anteriores autores, propone Txiki, a Hego Euskal Herria, la izquierda institucional no podría apoyar presupuesto alguno que no contemple cambios cualitativos en cuanto a fiscalidad. Lo más grave, a su entender, no es que la derecha haga lo que se espera de ella, sino que la izquierda renuncie a confrontar esa política dejando claro que la fiscalidad revela la ausencia de un programa alternativo al de la derecha.

A continuación, se pasa a explicar la “puerta giratoria” vasca y su efecto en la fiscalidad. Este fenómeno, que permite al poder económico controlar la política, no solamente se aprecia en el aspecto fiscal, pero es en este ámbito donde Txiki ha decidido detenerse y analizar.
Tomando como base la parcialidad de numerosos actores de la política vasca, así como la unanimidad del PNV y el PP en la defensa de los ajustes propuestos (ajustar el gasto público en las materias de sobra conocidas, obviamente), realiza un recorrido a través de numerosos ejemplos (otra vez) que une las trayectorias políticas con los intereses comerciales mediante, por ejemplo, un trato fiscal privilegiado que supone a las claras un caso de elusión fiscal, o la justificación del impago de impuestos de determinadas empresas disfrazándolo de “aportación fiscal”, una práctica que consiste en computar los impuestos pagados por los trabajadores y trabajadoras o los consumidores, como impuestos pagados por las empresas. El sindicato ELA, una vez más, a través de su secretario general Mitxel Lakuntza, denunció esta práctica en Radio Euskadi. Hay que recalcar que la denuncia no tuvo prácticamente eco en otros medios de comunicación, algo que pone de manifiesto la complicidad entre ciertos medios y los intereses de las empresas.

Un poco más adelante, Txiki Muñoz se hace la siguiente pregunta: ¿Por qué si la fiscalidad en la CAPV debe ser armonizada en los tres territorios no se debate y aprueba en el Parlamento Vasco?
Hay dos razones principales; la primera, porque se impone una lectura arcaica de la ley, la que más conviene a los poseedores de rentas altas y la segunda, porque ese sistema institucional facilita aprobar una fiscalidad injusta, llegando incluso a practicar dumping fiscal entre las propias haciendas vascas y hacerlo con absoluta falta de transparencia. Aunque sobre este tema no exista debate, las haciendas vascas, gobernadas todas por el PNV, practican dumping fiscal entre ellas, liderado en la mayoría de las ocasiones por la Diputación de Bizkaia.”

Nos encontramos, pues, ante una estructura institucional que favorece la opacidad y el dumping fiscal en Euskadi. Los partidos políticos vascos renunciaron a la aplicación de lo que establece el Estatuto de Gernika respecto a la posibilidad de que sea el Parlamento Vasco quien decida las normas fiscales; aunque el texto sea claro en cuanto a las competencias del Parlamento Vasco para dictar normas fiscales, el PNV no ha hecho nunca uso de esta ley, que le hubiera permitido decidir la fiscalidad en toda la comunidad autónoma.

“La estructura institucional con la que se decide la fiscalidad en nuestro país no tiene parangón en todo Europa. Un Parlamento Vasco -institución legislativa común- y tres Juntas Generales, una en cada territorio histórico de la CAPV, donde la decisión sobre los impuestos -junto a los Presupuestos, la decisión más importante que adoptan nuestras instituciones- es aprobada por los parlamentos forales. Es inaudito que este hecho no provoque un mayor debate político. El Gobierno administra en la CAPV más el 70% del gasto público y, sin embargo, apoya que la competencia para decidir los ingresos resida en las Juntas Generales de los territorios históricos.”
Añade también: “Resulta revelador fijarse en cómo conciben los responsables políticos del PNV los procedimientos en los que se aprueba la fiscalidad. Arantxa Tapia, consejera del Gobierno, en un momento en el que aparecieron algunas discrepancias públicas en materia fiscal entre su compañero de Gobierno, Pedro Azpiazu y los tres diputados generales y Confebask, salió a la palestra fijando su posición: “Lo que no podemos hacer es debatir este tema delante de las cámaras”. La consejera defendía la opacidad porque sabía que la fiscalidad injusta que aprobaban iba en paralelo a la falta de transparencia con la que se decidía. Ni información, ni transparencia, ni participación, ni democracia…”

La indignación de Txiki se pone de manifiesto en el siguiente párrafo: “Esta estructura institucional favorece las actuaciones de dumping entre las propias haciendas vascas. Los planteamientos de dumping los suele iniciar la Diputación de Bizkaia que, en ocasiones, sin contar con el OCT, toma decisiones de forma unilateral. Son actuaciones, todas ellas, que benefician a las rentas altas, de capital y empresariales, y se adoptan sin que sean objeto de atención por parte de la oposición política ni de la mayoría de los medios de comunicación. En nuestro pequeño país se practica el dumping fiscal entre instituciones gobernadas, todas ellas, por el PNV. Inaudito pero real.”

Pasando ahora a otro aspecto, el del contenido y utilización de los conciertos y convenios económicos, se hace hincapié en la falta de cultura política que se aprecia en la sociedad vasca en cuanto a temas de suma importancia, como puede ser la fiscalidad, añadiendo la participación de las instituciones y partidos sistémicos en la promoción de dicha ignorancia: “Quienes toman esas decisiones cuentan a su favor, entre otras cosas, con que se trata de temas complejos para ser asimilados con normalidad por la mayoría social. Esa complejidad no debiera ser obstáculo para favorecer su conocimiento. El velo de la ignorancia es muy costoso. Lo importante es si existe o no voluntad política para romper los obstáculos que impone el poder a la información veraz.”
Los contenidos concretos de la política fiscal vasca van, desde las “vacaciones fiscales” [20] (declaradas ilegales por la UE años más tarde) que conllevaron una multa de 30 millones de euros y que Txiki resume así: “La responsabilidad por esa multa estaba clara: no fueron los ciudadanos vascos los que decidieron incumplir. El diario El País recogía, a raíz de una denuncia de ELA ante la fiscalía, que “la propia UE se quejó amargamente en algunos documentos internos de las maniobras dilatorias, como el envío de furgonetas llenas de documentación a Bruselas para que fueran los propios funcionarios europeos los que cribaran la documentación y fijaran cuáles de las ayudas eran compatibles con la UE y cuáles no”. Aquella denuncia de ELA fue sobreseída. Se trataba de delitos económicos que afectaban a la élite política vasca y a Confebask. Muchos expedientes penales conllevan penas duras con muchas menos pruebas.”, hasta las “amnistías fiscales”, a la vez que establece una comparativa de presión fiscal sobre Producto Interior Bruto (PIB).

Hace referencia también a la desigual e injusta contribución de la imposición directa e indirecta, la recaudación del Impuesto de Sociedades, que cae significativamente en fase de recesión y no se recupera en la de crecimiento, la contribución de las rentas de trabajo y de las actividades económicas, los privilegios de las rentas del capital, la connivencia con el fraude fiscal, la relación entre la baja presión fiscal y la deuda pública, el acuerdo fiscal de las haciendas vascas con la patronal y las grandes empresas, y el veto del PNV hacia un tipo de fiscalidad progresista.

 8 Presupuestos. El gasto social vasco, a la cola de la UE

Últimamente parece ser que todos los gobiernos se empeñan en ser “los más sociales de la historia”: “Es parte de una estrategia comunicativa que pretende sustituir con titulares el análisis riguroso de las partidas presupuestarias y su evolución a lo largo de los años. Los gobiernos no quieren un debate sobre contenidos concretos y, con el paso de los años, han convertido la presentación de los presupuestos es un acto más de propaganda política.”
Pero estas afirmaciones deben ser valoradas exhaustivamente y, para ello, deberán cumplir como mínimo con dos premisas:

1. Que las necesidades sociales estén cubiertas con dignidad
2. Que los contenidos presupuestarios y su evolución histórica resistan el análisis

En cuanto al primer punto, basta una mirada para detectar los déficits sociales, y el segundo se contesta tomando como referencia el Producto Interior (PIB) y calculando el gasto público que realiza cada institución, ya sea en educación, sanidad, dependencia, vivienda… “Básicamente, existen tres decisiones políticas que condicionan el presupuesto antes de que éste sea elaborado: en primer lugar, la decisión sobre el techo de gasto; en segundo, los ingresos fiscales de que se dispone, y en tercero, el recurso al endeudamiento.”

Respecto a dos de esas variables (techo de gasto y endeudamiento), comenta Txiki la aceptación de las instituciones vascas en cuanto a que su capacidad de actuación se vea limitada por las “reglas de estabilidad” y, sobre la política fiscal, son las propias instituciones las que se niegan a obtener más ingresos. Otro elemento ligado a la política presupuestaria tiene que ver con la obsesión de cerrar con superávit, de manera que, aunque estén consignadas partidas de gasto, al final se decide no ejecutarlas.

Básicamente, existen tres decisiones políticas que condicionan el presupuesto antes de que éste sea elaborado: en primer lugar, la decisión sobre el techo de gasto; en segundo, los ingresos fiscales de que se dispone, y en tercero, el recurso al endeudamiento. Txiki

“Durante la pandemia los gobiernos ocultaron que su política presupuestaria era continuista, presentando iniciativas de “ayudas” de cuantías muy reducidas y reguladas con una serie de requisitos tan estrictos que impedían, en muchos casos, que pudiesen llegar a las personas y sectores afectados. Esas ayudas quedaban en mal lugar si eran comparadas con las que se destinaban a esos mismos fines en otros países. Con lo que sí contaron las ayudas fue con una publicidad institucional que apelaba, como en otras cuestiones, al “Auzolan–Bien común”. [21]
A continuación, analiza las líneas presupuestarias básicas desarrolladas por el Gobierno Vasco en sus presupuestos, especificando las distintas características, además de temas muy importantes como pueden ser las transferencias de dinero público a empresas, la facilitación de liquidez y las ayudas directas a las empresas, el empleo público y la negociación colectiva, la subcontratación abusiva sin cláusulas sociales que protejan a las trabajadores y trabajadoras, la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), las Proposiciones No de Ley (PNDL) y la renuncia de los gobiernos de la CAPV y Nafarroa a hacer uso del margen presupuestario que permite la suspensión de las “reglas de estabilidad”.

 9 Covid-19. La misma política económica ante situaciones extraordinarias

“Durante la sexta ola de la pandemia los responsables de los gobiernos continuaban explicando a la ciudadanía que se trataba de algo inesperado, mientras los servicios públicos que dependían de ellos se saturaban y la sanidad privada hacía negocio. Sin embargo, en opinión de muchos científicos no se trataba de algo “tan inesperado”.”

“Detrás de la mediocridad política y de la connivencia con intereses empresariales hay muchas vidas perdidas. Uno de los ejemplos más crueles durante la pandemia ha sido el veto de la UE en la OMC Organización Mundial del Comercio
OMC
Firmado el acuerdo el 15 de abril de 1994 y en vigencia desde el 1º de enero de 1.995, la OMC sustituye al GATT (Acuerdo general sobre aranceles y comercio). La mayor innovación introducida es que la OMC posee el estatuto de organización internacional. Su función es asegurar que ninguno de sus miembros se entregue a cualquier tipo de proteccionismo, a fin de acelerar la liberalización mundial de los intercambios comerciales, de favorecer las estrategias de las multinacionales. Está dotada de un tribunal internacional (órgano de resolución de conflictos) que juzga las eventuales violaciones de su texto fundador de Marraquech.
(Organización Mundial de Comercio) ante los intentos de liberar las licencias con el objeto de que las vacunas pudiesen llegar a los países subdesarrollados. La UE defiende al potente lobby Lobby
Lobbies
Los lobbies son grupos de presión de interés privado, que defienden la mayor parte del tiempo los intereses de grupos industriales o financieros. Se cuentan unos 40.000 lobbistas en Washington
de las multinacionales farmacéuticas. En la primera fase de la crisis el Gobierno Vasco, igual que otros, no contaba con la infraestructura suficiente para hacer frente a lo que venía. Le costó reaccionar y centró sus decisiones -y presiones- en recordar permanentemente que “la economía era muy importante” y que había que “convivir con el virus”.

En la OMC ante los intentos de liberar las licencias con el objeto de que las vacunas pudiesen llegar a los países subdesarrollados, la UE defiende al potente lobby de las multinacionales farmacéuticas. Txiki

Muchos eran los puntos débiles de la situación vivida en esos momentos:

  Incapacidad para realizar las pruebas
  Falta de material de protección
  Inexistencia de una estructura sanitaria bien dotada en Atención Primaria y Salud Pública
  Ausencia de tratamientos adecuados y vacunas

Ante este panorama, el Gobierno Vasco presionó al español para que no decidiese confinar, colocando los intereses empresariales por encima de todo lo demás, incluida la seguridad laboral de las personas trabajadoras. Obviando que, si la prioridad era salvar vidas, confinar era lo correcto. Los científicos reclaman auditorías independientes para evaluar la gestión de la Covid-19 mientras los gobiernos se muestran reacios, tratando de evitar el cuestionamiento de la versión oficial.

En la desescalada de las medidas de protección la planificación brilló por su ausencia, sumándose a esto la desatención sufrida por las persona afectadas por patologías no COVID, incluso las graves y muy graves.

El tema de las residencias de personas mayores merece un capítulo aparte: “En ellas se han concentrado los peores datos de afectación de la pandemia. Las informaciones reflejan la crónica de un sector desprotegido, con graves efectos para la calidad de vida y la supervivencia de miles de personas. Las personas usuarias han vivido situaciones muy duras, y sus familiares también. El virus ha sido cruel en este sector, tanto por la edad de las personas, como por las patologías que sufrían. Son notorios los déficits básicos que vienen de antes de la pandemia, tal como lo habían puesto de manifiesto los conflictos laborales. Incluso existen informes del propio Gobierno Vasco en los que se recoge que el virus se cebó con más intensidad en aquellas residencias donde las ratios de personal eran peores. Lo recogía un informe del Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales remitido al Parlamento Vasco del que el Gobierno no ha tenido interés en que tenga publicidad. Como se cita en el capítulo referido a la privatización, en las últimas décadas las instituciones vascas tomaron la decisión de favorecer que empresas privadas se dedicasen a hacer negocio con las necesidades sociales. Con ese objetivo establecieron unas ratios de personal muy pobres y controles laxos para que el beneficio Beneficio Resultado contable positivo neto fruto de la actividad de una sociedad. El beneficio neto es el beneficio después de impuestos. El beneficio a distribuir es la parte de aquél que puede ser repartido entre los accionistas. privado se lograse a costa de la calidad asistencial y de la precariedad de los trabajadores.”
El Gobierno Vasco no ha tomado en ningún momento decisiones económicas extraordinarias dedicadas a paliar los efectos de la crisis sanitaria, que pasaría a ser una triple crisis en poco tiempo; una crisis sanitaria, social y económica.
Es difícil resistirse al argumento de que el gobierno utilizó la Covid-19 como coartada para imponer disciplina social: “Añoran una sociedad de ciudadanos dóciles a los que poder trasladar sin resistencias el contenido injusto de sus decisiones.”
Sin embargo, el Gobierno Vasco valora su gestión muy positivamente.

 10 FONDOS UE. El dinero es para las grandes empresas a cambio de futuros Futuros
Contrato a término
Un contrato a término o futuros (futures en inglés) es un compromiso firme de entrega normalizado, donde las características son conocidas de antemano, por una cantidad determinada de un activo subyacente definido con precisión, en una determinada fecha, denominada vencimiento, en lugar prefijado, y negociado en un mercado a término organizado. Los contratos a término son los instrumentos financieros que más se negocian del mundo.
recortes

“A medida que pasan los meses es más fácil comprobar la falacia con la que fueron presentados los Fondos UE por los gobiernos y los partidos políticos que los aprobaron.”
Como bien dice Txiki: “La gestión de los Fondos es una cuestión de clase. Si en la crisis de 2008 los ajustes se impusieron para dar dinero público a la banca, en ésta de la Covid-19, el flujo mayoritario del dinero que pueda llegar de la UE irá a parar a grandes empresas para que financien sus proyectos de inversión”.

El PNV y el PSOE no discrepan sobre el modelo planteado por la UE para la recepción de los fondos. La disputa se limita a quién desempeña el papel de interlocutor ante las grandes empresas en la elaboración de los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica, compartiendo lo esencial: que el dinero vaya las grandes empresas, así como las condiciones a la hora de pagar.

El flujo mayoritario del dinero que pueda llegar de la UE irá a parar a grandes empresas para que financien sus proyectos de inversión. El PNV y el PSOE no discrepan sobre el modelo planteado por la UE. Txiki

“Los Fondos UE plantean dos debates, el primero su naturaleza y el segundo el destino del dinero. Antes de evaluar el destino es importante examinar su naturaleza. Se trata de un refuerzo del presupuesto de la UE para los años 2021-2027, aprobado tras un duro debate entre los países denominados “frugales” [22] y los del sur, que suponen 390.000 millones en transferencias directas y 360.000 millones en préstamos. Un dinero que, como Estado que contribuye a los presupuestos de la UE, debe colaborar con aportaciones para su financiación.”

“Los medios de comunicación han reflejado tanto los objetivos de los Fondos como la opacidad en su gestión, siendo el Gobierno del Estado quien decide qué proyectos se envían a Europa. Los proyectos presentados están obligados a establecer un cronograma con sus respectivas metas y los desembolsos van a depender de su consecución satisfactoria. Acceder a ellos supone la intervención de las políticas de los países que los soliciten desde el año 2021 hasta 2026.

El Lehendakari Urkullu explicó que para elaborar la propuesta que su Gobierno había remitido al español había contado con los agentes económicos y sociales. No era cierto. Hasta los sindicatos que formaban parte de la mesa de diálogo social (CCOO y UGT) manifestaron que con ellos no había hablado nadie. Los proyectos presentados fueron criticados, incluso, por miembros de la ejecutiva de Eudel, acusando al Gobierno de marginar en su elaboración a los ayuntamientos. El Gobierno de Urkullu gestionó su propuesta como a él le gusta: a puerta cerrada.”

Se podría decir más alto, pero no más claro.

Y, una vez más, las grandes empresas son las principales beneficiadas de la colaboración público-privada, perfectamente dispuestas a vampirizar las cuentas públicas desde una situación absolutamente privilegiada, chantajeando incluso a las administraciones a la hora de decidir dónde radican las inversiones, con el objeto de obtener más ventajas (ayudas a fondo perdido, rebajas fiscales, etc.). A pesar del secretismo se pueden citar algunos ejemplos, como el proyecto Iberlyzer o el consorcio Volkswagen- Iberdrola- Estado Español, subordinando los proyectos públicos.

La duplicidad en los proyectos y el populismo provinciano están a la orden del día, además de lo que afirma Txiki: “Los partidos que apoyaron el decreto de los Fondos sabían que, tras el aumento de la deuda pública, vendrá una fase en la que se decidirá qué se debe primar en su reducción imponiendo, una vez más, la senda de estabilidad (techo de gasto y límites a la deuda y al déficit). Esa fase será más dura en la medida en que los tipos de interés aumentan encareciendo la financiación y en tanto no se realice una profunda reforma fiscal.”

“Tras el aumento de la deuda pública, vendrá una fase en la que se decidirá qué se debe primar en su reducción imponiendo, una vez más, la senda de estabilidad (techo de gasto y límites a la deuda y al déficit).” Txiki

Insiste también en la gravedad que supuso que la izquierda institucional aceptara los Fondos UE porque supone una diferencia respecto al papel que desempeñó la izquierda política (a la izquierda del PSOE ) en la crisis de 2008:
“¿Defiende la izquierda institucional que la recepción de los Fondos venga acompañada de recortes y reformas antisociales? ¿Apoya que sean para la gran empresa mientras se deja de invertir en los servicios públicos? La izquierda debió decir no y explicar a sus bases qué suponía la condicionalidad y cuál sería el destino de los fondos.”
Lo que se discute no es la necesidad de financiación, sino de dónde se obtiene y qué precio conlleva.

 11 CAMBIO CLIMÁTICO. Las grandes empresas imponen contenidos y tiempos a la política.

“Si hacemos caso a los requerimientos científicos, solo las actuaciones radicales en sentido contrario a las que provocan el cambio climático tienen efecto en el combate contra el mismo.”
El conflicto de intereses entre la conservación de la vida en el planeta y los beneficios económicos de las grandes empresas es una realidad incuestionable, así como la influencia de estas últimas en los gobiernos. Año tras año se suceden las Conferencias de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP) [23] sin adoptar compromisos vinculantes. Este es el más claro ejemplo de banalización del problema: la ausencia de cualquier tipo de sanción coercitiva para acabar con las conductas intolerables de muchos estados. Estas sanciones no están tipificadas porque los mayores afectados son las grandes empresas.

Si hacemos caso a los requerimientos científicos, solo las actuaciones radicales en sentido contrario a las que provocan el cambio climático tienen efecto en el combate contra el mismo. Txiki

Como afirma Txiki: “De hecho, las propias cumbres se han convertido en foros en los que líderes de los gobiernos y las grandes empresas acuden, exponen sus discursos, ocupan las portadas de los medios de comunicación y… Hasta la próxima. No se implementan acciones comprometidas porque los gobiernos aceptan verse neutralizados por las empresas.”

Pero detengámonos un poco en la cumbre del clima por excelencia, la COP; desde su primera edición en 1995 en la ciudad de Berlín, el objetivo inicial de “estabilización de las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera a un nivel que impida interferencias antropogénicas peligrosas en el sistema climático” ha pasado a ser 30 años más tarde “una transición más rápida hacia fuentes de energía renovable, un mayor uso de soluciones climáticas naturales y más inversiones tanto del sector público como del privado, especialmente para ayudar a los países que se han visto más afectados por los impactos del cambio climático.”
Según explica el sociólogo francés Pierre Veltz en su artículo “Bifurcación ecológica y economía deseable” [24] : “Más que una transición, se trata de hacer una «bifurcación» y esta bifurcación plantea un reto mucho más social que técnico.”

Esta misma línea se recoge en la serie de artículos escrita por Éric Toussaint y Maxime Perriot [25] cuando se trata de analizar el lote de falsas soluciones aportadas por las sucesivas COPs: “El Fondo de respuesta ante pérdidas y daños, captación de carbono: las falsas soluciones promovidas en la COP 28. Sin ninguna sorpresa, la COP 28 celebrada en Dubái en diciembre de 2023 y la COP 29 realizada en Bakú, Azerbaiyán, en 2024 se convirtieron en escaparates de falsas soluciones promovidas por el capitalismo verde.”

Porque del capitalismo verde es necesario también hablar.

Desde Costa Rica nos llegan estas palabras de la profesora de Sociología y Estudios de la Mujer en la Universidad Brock (St. Catharines, Ontario) Ana Isla, allá por 2015:
“El capitalismo “verde”, como se presenta en las tres Conferencias de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, se ha propuesto para enfrentar las crisis del medio ambiente (ecológicos) y social (pobreza) que se vive actualmente en todo el mundo. Este «enverdecimiento» es una nueva etapa de acumulación de capital que implica: el uso de mecanismos financieros, como los intercambios de deuda por naturaleza; la licencia de las ONG ambientales para negociar los recursos de los países endeudados con las grandes corporaciones, el establecimiento de los valores monetarios de los “bienes comunes Bienes comunes En economía los bienes comunes se caracterizan por un modo de propiedad colectiva, que se diferencia tanto de la propiedad privada como de la pública. En filosofía hacen referencia a aquello que comparten los miembros de una misma comunidad, ciudad o la propia humanidad, desde un punto de vista jurídico, político o moral. globales”. Por otro lado, los nuevos trabajadores son mujeres y hombres campesinos e indígenas que han adquirido nuevos papeles como proveedores de servicios en las nuevas industrias, como el llamado turismo ecológico. En este artículo se considera Costa Rica en esta etapa del capitalismo y se hacen las críticas al respecto.” [26]

Volviendo a Txiki: “Las actuaciones del PNV en las instituciones en las que gobierna son coherentes con la defensa de los intereses de las empresas. En el mejor de los casos impulsan un “ecologismo institucional”, al que dedican mucha propaganda. Las acciones tienen poco que ver con las buenas palabras que se han convertido en un lugar común para la inacción. ¿Quién, si no el Gobierno, es el responsable de que tengamos el dato del 9% de energía procedente de las renovables? Sin embargo, quienes llevan 40 años gobernando nos cuentan las cosas como si la responsabilidad fuese de la ciudadanía. Se puede afirmar que el problema se les fue de las manos.”
Como ejemplos de esta mala gestión cita los residuos, recogida de basuras e incineradoras, la bonificación con dinero público al consumo de diésel, la extracción de gas natural en Araba, la modificación de leyes para imponer proyectos, incluso privados (Ordenación del Territorio, por ejemplo, con la conocida como Ley Tapia [27] criticada por ELA desde el principio), el fracking, los corrugados de Azpeitia, el tren de Alta Velocidad o los proyectos privados del hidrógeno (no tan verdes como dicen).

Finaliza con una frase, no por repetida, más necesaria que nunca: “No hay voluntad para desarrollar la transición energética desde lo público.”

 12 FEMINISMO: Dejar sin espacio las reivindicaciones de emancipación y de clase

“Sin restar ninguna importancia a las particularidades que cada espacio reivindicativo necesite, desde un punto de vista alternativo es un error separar estructuralmente las luchas de clase, étnicas, ecológicas y de género. Martin Luther King expuso con acierto que “la injusticia racial era inseparable de la injusticia económica”.”

Con estas palabras se abre el capítulo 12, en el que se da gran importancia al pensamiento de la filósofa, política y feminista estadounidense Nancy Fraser [28] y su teoría de las 3 R. Fraser considera que para alcanzar la justicia y la igualdad de género son necesarias tres premisas: el Reconocimiento, la Redistribución y la Representación.

“En el modelo defendido por Fraser el conflicto sería el eje de la acción, por ejemplo, sindical, enlazando las realidades laborales y de género. No habría atajos en los que dejar abandonados aliados estratégicos. El sindicalismo no debe permitir deslizamientos que impidan colocar como eje
central de su trabajo un feminismo de clase, en el que las mujeres trabajadoras ocupen el centro de la acción reivindicativa, abriendo con ello nuevos caminos para el sindicalismo y perfilando una identidad de clase incluyente que permita confrontar con el neoliberalismo en mejores condiciones, además de renovar las propias estrategias sindicales y organizativas.”
Ejemplos de mujeres “exitosas” que siguen los preceptos de la teoría neoliberal, y más allá de ella, tenemos por doquier, desde la heredera del imperio Botín en el mundo de las finanzas hasta la consejera del Gobierno Vasco en la política, Arantxa Tapia.

El sindicalismo debe colocar como eje central de su trabajo un feminismo de clase, en el que las mujeres trabajadoras ocupen el centro de la acción reivindicativa. Txiki

Las luchas sociales y sindicales emprendidas por mujeres que cuestionan el modelo privatizador a través de huelgas de muy larga duración son un ejemplo de ese feminismo de clase al que hace referencia Txiki, un feminismo de mujeres trabajadoras despreciadas por el sistema, por las propias instituciones, que se rebela ante tanta precariedad laboral en forma de subcontratas, brecha salarial, salarios bajos, condiciones precarias, ratios insuficientes, discriminación de género, etcétera. Mujeres a las que, como bien apunta Txiki, cuando deciden ir a la huelga, el propio Gobierno Vasco les impone servicios mínimos del 100% para neutralizar el conflicto.

“El conflicto de clase atraviesa de raíz la problemática de género y las huelgas dejan en evidencia dónde está cada uno. A un lado, el sindicalismo de clase, capaz de integrar la lucha feminista reivindicativa (no se puede entender lo uno sin la otra) y, en el otro, quienes han decidido abrir espacios al negocio privado imponiendo condiciones de explotación, negando a las mujeres, incluso, el derecho a protestar. El sistema político-económico, en vez de hacer frente a los problemas que tienen que ver con esa discriminación, opta por desarrollar campañas publicitarias en las que invisibiliza a las mujeres que luchan por sus derechos.”

El compromiso institucional con el feminismo nace y muere, en muchos casos, con un cartel para conmemorar el 8 de marzo. La violencia contra las mujeres, junto a las sentencias reaccionarias de tribunales machistas, ejercen de revulsivo a gran parte de la sociedad, lo que se ha traducido en la obligación de partidos y gobiernos a hacer algo más allá de cumplir con el protocolo.

“Las manifestaciones convocadas por el movimiento feminista llenaron las calles. Los medios de comunicación se hacían eco -como nunca antes- del sesgo patriarcal y rancio de las sentencias y de la impunidad con la que los responsables de esos hechos salían, en ocasiones, de los juzgados. En pocos años, gracias a una movilización feminista sostenida durante muchos años, lo que en el pasado era despreciado por la política sistémica, por ejemplo, acudir a las manifestaciones del 8 de marzo, pasó a ser objeto de atención preferente. De ser algo marginal en sus estrategias pasó a ocupar espacio, acudiendo a esas manifestaciones con la pretensión de obtener protagonismo. En ese sentido, el desembarco de cargos institucionales en las manifestaciones del 8 de marzo ha sido manifiesto.”

Una parte de ese desembarco se empeña en desclasar el movimiento feminista debilitando sus reivindicaciones y capitalizando las movilizaciones en beneficio propio. Optaron por trabajar para “institucionalizar” el movimiento feminista con el fin de condicionar su programa, relativizando todo lo relacionado con el conflicto entre capital y trabajo.

Un feminismo auténtico y decidido no puede resultar cómodo al sistema, el feminismo transformador necesita desmontar los mitos superficiales, ir a la raíz de los problemas y señalar los peligros de un movimiento que, muchas veces, deja atrás a las más vulnerables.

Llegamos así a la tercera parte del texto: Soportes Sistémicos.

 13 ALIANZAS A LA DERECHA. La izquierda institucional no altera la política neoliberal

“Las alianzas explican prácticamente todo. El objetivo fundamental del PNV en relación con ellas ha sido alcanzar las mayorías parlamentarias, las sumas partidarias que le permitiesen llevar adelante las políticas neoliberales y afianzar la referencia neoestatutista. Su prioridad han sido el PSOE y el PP, tanto en Madrid como en Hego Euskal Herria. Repásense los acuerdos y se observará cómo, estructuralmente, esa alianza se ha repetido a la hora de aprobar todos los temas importantes: fiscalidad, presupuestos, reformas de pensiones y laborales, bancarización de las Cajas, etc.”.

El PNV ha insistido durante años en afirmar que la izquierda institucional debe aceptar posiciones de “realismo político” y suscribir los acuerdos de gobernabilidad. No solo los partidos sistémicos apoyan las políticas neoliberales, Podemos y EH Bildu son un ejemplo de ello.

“Las ilusiones que recrea el neoliberalismo deben ser denunciadas como un ejercicio de mistificación para negar que en la base de todas las luchas está la injusta distribución de la riqueza y la lucha de clases. Lo mismo se debería decir de la ficción que recrea la izquierda institucional. No hay alternativa si se renuncia por parte de la izquierda a sacar conclusiones de la experiencia que revela el significado económico político y cultural de los propios hechos. Dar valor a la realidad, en un mundo alimentado de realidades virtuales, se termina convirtiendo en algo revolucionario. Son las necesidades de la gente oprimida, explotada, precaria… -nuestra clase- las que debería priorizar la izquierda en su conjunto, y son esas necesidades las que te conducen a confrontar con la práctica neoliberal. Esas graves situaciones sociales interpelan a la confrontación con el neoliberalismo, no a la autocomplacencia.”

En resumen, el PNV en cuanto a alianzas se trata, ha dado prioridad a las sistémicas (PP y PSOE ), pero cuando las cifras no le han sido favorables acude a Podemos y a EH Bildu sin cambiar los contenidos de su programa.

Son las necesidades de la gente oprimida, explotada, precaria… las que debería priorizar la izquierda. Txiki

Aplicando las mismas políticas, ha sido capaz de llegar a acuerdos con el PP, Podemos y EH Bildu, además de con su socio de Gobierno, el PSE-EE.
Algo que merece una mirada bien atenta…

 14 SUBORDINACIÓN DE LA SOCIEDAD ORGANIZADA. Obsesión por el control social

“No hay democracia sin contrapoderes. El PNV tiene aversión a cualquier forma de contrapoder real. Uno de los mejores ejemplos de intolerancia lo protagoniza el propio Lehendakari Urkullu al frente de su Gobierno, liderando una estrategia que tiene por objeto debilitar a las organizaciones que desempeñan esa función. Lo lleva adelante apelando al “humanismo”, una referencia con la que enmascara la legitimación de los privilegios de clase que él defiende.”

Palabras duras, estas de Txiki Muñoz. Privilegios de clase, humanismo fingido, síndrome del impostor, en suma.

Y continúa: “McCarthy en EEUU llegó a ver un comunista en el presidente Eisenhower y constituyó el Comité de Actividades Antiamericanas para perseguir a sus enemigos políticos. McCarthy era un fascista que veía comunistas en todos los lugares. Eran tiempos de la “caza de brujas”. Al neoliberalismo se le atribuyen una serie de objetivos en los que se esfuerza de manera incansable; entre otros, usar el poder político para facilitar la acumulación de riqueza; desarrollar una batalla permanente para hegemonizar el pensamiento, la educación y la cultura con el objetivo de alimentar un individualismo feroz; obsesionarse con el control de instituciones y organizaciones, alimentando redes de influencia clientelar para controlar la sociedad, y combatir toda discrepancia política, social o sindical con objeto de hacer desaparecer identidades alternativas, tratando de destruir las bases comunitarias que dan consistencia a esos proyectos colectivos. El PNV, en su práctica política hace suyos esos postulados, más si cabe estos últimos años.”

Txiki llama la atención acerca del peligro que supone restar importancia al autoritarismo del PNV y el debilitamiento, tanto de las bases comunitarias, como de las relaciones humanas basadas en la solidaridad. Al PNV le estorban la crítica social, la crítica política y también las organizaciones que confrontan democráticamente sus políticas, organizaciones que, habitualmente, sufren el desprecio por parte de la administración. No tolera un pensamiento que defienda políticas alternativas a sus prácticas neoliberales, quedándose todo en la creación de foros, como la mesa de diálogo social; espacios vacíos de contenido esencial, a los que quienes acuden, lo hacen sabiendo que no van a tener derecho a debatir a fondo cuestiones de calado, mientras que, por otro lado, se advierte la pretensión de disciplinar el movimiento sindical, controlar que las instituciones no ejerzan con autonomía sus funciones (UPV-EHU, EITB, Tribunal de Cuentas Públicas, diversas ONGs, etc.), cuestionar la autonomía de los ayuntamientos a la hora de imponer proyectos urbanísticos, industriales o medioambientales y alimentar toda una cultura política basada en el clientelismo.
“El Lehendakari Urkullu, desde un dogmatismo insuficientemente denunciado, no admite que pueda existir una política distinta a la suya, y concibe la protesta social como un signo de desestabilización, no como la expresión natural de una sociedad conflictiva, viva y fuerte. Como neoliberal que es, Urkullu prefiere que aumenten las injusticias a la expresión pública de conflictos que pretenden acabar con ellas.”

El PNV y la patronal comparten su aversión al sindicalismo reivindicativo, añade Txiki, precisando sus críticas hacia ELA con frases como: “ELA es una organización maximalista que se instala en conceptos periclitados como la lucha de clases”. No se puede negar lo cómodo que se encuentra el Lehendakari en foros empresariales denunciando el papel que desempeña el sindicalismo reivindicativo, defendiendo que la distinción entre izquierdas y derechas está superada, así como la división de la sociedad en clases. Debe ser que él ya la ha superado tanto que no está dispuesto a escuchar las razones detrás de los conflictos, simplemente los niega, combatiendo a sus protagonistas y a sus legítimos representantes.

Se llega así al punto de considerar la política como patrimonio exclusivo del dinero, neutralizar la reivindicación social y el derecho de huelga, construir una estructura de pensamiento para consolidar su proyecto político iniciando una batalla intelectual con el fin de obtener el control social y recurriendo a personajes que refuercen el pensamiento neoliberal, como Daniel Innerarity [29] el filósofo vasco que afirma que los referéndums fraccionan la sociedad:

“Innerarity afirma que hay cosas que son demasiado “importantes” como para que sean votadas (era el caso del referéndum catalán), sin que las filtre esa élite política y concluía que en Cataluña se habían utilizado “instrumentos inadecuados para los fines perseguidos”. ¿Qué instrumentos eran inadecuados? ¿La represión del Estado golpeando a ciudadanos indefensos, espiar a líderes políticos y a sus abogados, o movilizar democráticamente a la sociedad para tratar de ejercer ese derecho?

Para Innerarity las “cosas públicas” serían tan complejas que las ciudadanas y ciudadanos no estaríamos capacitados para decidir sobre ellas. Una justificación para legitimar el funcionamiento antidemocrático de las élites políticas y económicas, que siempre -aunque él no lo diga así- declinan a la perfección los intereses del dinero. Innerarity apoya que se veten los debates que no interesan al poder. Su pensamiento, ampliamente difundido por muchos medios de comunicación (Vocento, El País, Grupo Noticias, EITB, etc.), lo expone desde una pretendida superioridad intelectual, rechazando las posiciones de quienes cuestionan la cada vez más precaria calidad de la “democracia” actual.”

Encaja Txiki también las opiniones de Juanjo Álvarez, director de la Cátedra Universidad/Empresa de Confebask y las Universidades de Sistema Universitario Vasco (UPV-EHU, Deusto y Mondragón Unibertsitatea) cuando coincide con Urkullu defendiendo públicamente que “ELA desplaza del centro de su actuación la dimensión propia sindical para pasar a priorizar la opción por el cambio de modelo económico” ¿? Habría que averiguar a qué se refiere exactamente esa “dimensión propia sindical”, que resulta algo inquietante…

 15 MEDIOS DE COMUNICACIÓN. La información al servicio del poder económico

“Demasiados medios se convirtieron en instrumentos mercenarios de propaganda al servicio del dinero, de los gobiernos o de determinados partidos políticos, devaluando las bases informativas y culturales mínimas que una democracia que se precie necesita.”

Con estas palabras comienza el capítulo 15, un capítulo importante ya que trata los medios de información, la banalización de la información, una de las primeras causas del crecimiento de la extrema derecha y el aumento de la abstención en los procesos electorales. Que el periodismo ético y profesional esté basado en el cuestionamiento al poder, parece ser que ya no se lleva, lo que prevalece ahora son los grandes medios torpedeando a la audiencia con datos, cifras, fechas y un montón de noticias a toda velocidad que no permiten ni la asimilación ni, mucho menos, el análisis de lo que se está escuchando. La “opresión de lo instantáneo” es una estrategia pensada para no pensar, para eliminar el juicio crítico; ya lo decía Fidel Castro en 2005: “los medios masivos se apoderaron de las mentes no solamente a base de mentiras, sino de reflejos condicionados que afectan a la capacidad de pensar, y no es lo mismo estar desinformado que haber perdido esa capacidad de pensar”.

Repasando los contenidos informáticos de grupos mediáticos y analizando de qué se informa y a quién se da voz, se puede comprobar el peso abrumador de las informaciones y valores proempresariales con relación a la marginación de las posiciones de quienes defienden políticas alternativas. El desequilibrio en el acceso a los medios es brutal.

Por otro lado, y en cuanto al uso de las redes sociales, Txiki afirma lo siguiente: “Diversas organizaciones en la izquierda han renunciado paulatinamente a los espacios formativos y de debate para centrarse en la comunicación virtual, sin dar el valor que merece a la aprehensión del conocimiento, al estudio, a la lectura, al contraste de opiniones y al debate político y social. Hablar y debatir, elementos aún más importantes cuando nos referimos a la militancia social y política para que ésta actúe como líder de opinión allí donde milita. Alimentar el juicio crítico de la militancia es imprescindible. Ese conocimiento que dé perspectiva política a la militancia debe labrarse a fuego lento, huyendo de la inmediatez.”

Sabias palabras, que se refuerzan con la investigación llevada a cabo en EEUU entre 2011 y 2021 y en la que se concluye que se lee menos y las editoriales se adaptan reduciendo el número de páginas de los libros alrededor de un 12%. El director del estudio afirmaba: “Nuestra principal hipótesis fue que la capacidad de atención de los lectores es más corta hoy en día. El causante es el aluvión de estímulos que recibimos, principalmente a través de las redes sociales. No es que la atención de la gente, decaiga, sino que nos la roban”.

Diversas organizaciones en la izquierda han renunciado a los espacios formativos y de debate para centrarse en la comunicación virtual, sin dar el valor que merece a la aprehensión del conocimiento, al estudio, a la lectura, al contraste de opiniones y al debate político y social Txiki

La falta de independencia de los medios puede observarse en la televisión pública vasca, al servicio del Gobierno y del PNV, en la que se potencia el castellano frente al euskera y que el autor define en estos términos: “Nuestro país, su gente, su cultura y su idioma se merecen otro modelo público de radio y televisión. EITB debería huir del control partidario -no del público- y del vertedero en el que la lucha por las audiencias ha convertido a muchos medios. Deberíamos preguntarnos sobre qué referentes trabaja un medio público vasco, cuáles son sus ejes comunicativos y, por supuesto, debatir sobre la importancia que hay que dar al euskera en la programación de EITB.”

 16 CORRUPCIÓN POLÍTICA. Cuando se normaliza, la democracia es una ficción

“La corrupción no inhabilita al PP para hacer política”, Joseba Egibar, portavoz del PNV en el Parlamento Vasco.

Espeluznante declaración…

A continuación, unas palabras de Txiki con relación a la corrupción:

“El mayor problema de la corrupción, además del propio hecho en sí, tiene que ver con la tolerancia hacia ella; la de la sociedad, hasta el punto de que la ciudadanía acepte convivir con normalidad con ella (se trataría de una noticia más); y la de la política, porque no se toman las medidas necesarias para ponerle coto. Porque, más allá de las reacciones momentáneas para salir del paso, el hecho de que, por ejemplo, un partido esté incurso en casos de corrupción estructural, no afecta a las estrategias de gobernabilidad con otros. Hoy se le llama corrupto, pero mañana se gobierna con él. La primera (la percepción social) debilita los resortes reactivos de una sociedad para depurar conductas intolerables. La segunda (la política) es mucho más grave, porque corresponde a los representantes públicos tomar decisiones para impedir esos hechos y, para que cuando sucedan, se depuren responsabilidades, también las políticas. En términos generales la política sistémica convive con la corrupción, dejando que el transcurso del tiempo actúe como eximente.”

Txiki considera importante insistir en la corrupción del PP por dos razones: porque este partido político ha llegado al límite en este aspecto y porque ha sido aliado del PNV mientras Rajoy gobernó en el Estado. También menciona casos que afectan específicamente a Euskadi, en concreto los acuerdos del PNV con el PP que se llevaron a cabo en una situación coyuntural en la que no hubo un solo avance en materia de autogobierno, ni política penitenciaria, ni en nada; muy al contrario, el PP en esa misma época no dudó en manipular los sucesos de Altsasu [30] para evitar la polarización de los medios sobre sus problemas. Controlaban a los jueces y la agenda comunicativa y lo hicieron sin que las relaciones con el PNV se viesen afectadas. Así mismo, añade:

“Tras hacerse pública la sentencia de la trama Gürtel los propios dirigentes del PP acuñaron una frase para defenderse: las urnas les habían absuelto. “Los hechos que se habían juzgado -decían- eran anteriores a las últimas elecciones generales celebradas” en el Estado y, una vez conocidos los resultados, las urnas -en su opinión- dejaban sin efecto su responsabilidad política. No pasaba nada.”

En términos generales la política sistémica convive con la corrupción, dejando que el transcurso del tiempo actúe como eximente. Txiki

Parece ser que la única forma de hacer cambiar al PNV sus posiciones acerca del PP fue la presión social que se generó. Y continúa así: “Que no se castiguen conductas delictivas en España no significa que sus autores no sean delincuentes; significa que cuentan con protección política y judicial.

Y todo esto sucede en un momento en el que la derecha española reconstruye sus posibilidades de gobernar en el Estado en el extremo derecho con referencias de cruzada nacional.
El nivel de tolerancia de la corrupción -que siempre ha existido en diferentes grados- por parte de una sociedad es también proporcional a la normalidad con la que los diversos partidos políticos deciden convivir con ella. Una sociedad que acepta convivir con la corrupción sistémica de la clase política gobernante está enferma.”

 17 SEGURIDAD, ORDEN Y ERTZAINTZA. Quieren criminalizar las protestas sociales

Cuando el capitalismo atraviesa dificultades, el poder político que representa sus intereses convierte los conflictos sociales en problemas de orden público para que las fuerzas de seguridad le ayuden a imponer políticas injustas. Txiki

Ante la protesta social, el poder recurre a la represión. Cuando el capitalismo se encuentra en problemas, el poder político representante de sus intereses transforma las reivindicaciones sociales en problemas de orden público para que las fuerzas de seguridad cooperen a la hora de implementar políticas injustas. Las causas generadoras de injusticias no existen en el diccionario del neoliberalismo, por lo que la actuación política sobre las mismas está fuera de sus lógicas.

Pensar que la lógica neoliberal pueda reconocer que la mayor parte de los conflictos sociales se originan a causa de la propia naturaleza del sistema capitalista, legitimador de la acumulación de capital a través de la desposesión al resto de la sociedad, no cabe en sus esquemas. Y la respuesta siempre ha sido la misma; desde el inicio, un simple repaso histórico es suficiente para entender el proceso: cuando la desestructuración social ha avanzado como consecuencia de políticas neoliberales, la derecha conservadora va a la par promulgando leyes autoritarias.
Estas dolorosas palabras de Txiki ponen en la mesa el azote de la conocida como “Ley Mordaza” [31] :
“La legislación del Estado español se ha ido adaptando para garantizar un modelo policial y penal de corte esencialmente represivo. Un ejemplo fue la denominada Ley de Protección Ciudadana (conocida como Ley Mordaza), aprobada por el PP en tiempos en los que tenía mayoría absoluta. No era casualidad que esa ley viese la luz durante una dura crisis. El PP sabía que su política estaba aumentando las injusticias y decidió ampliar los instrumentos represivos: tipificar más delitos, sanciones administrativas, represión de movilizaciones, persecución de ideas, encarcelamiento, etc. Todo para tratar de fabricar un sentimiento de seguridad ajeno por completo a la socialización de unas condiciones de vida dignas.”

La crisis a la que hace referencia Txiki incluye la aparición del 15M (la Ley Mordaza entró en vigor el 1 de julio de 2015 como una modificación de la Ley de Seguridad Ciudadana), un fenómeno cuyas movilizaciones corrieron como la pólvora por todos los medios de comunicación de Europa y más allá, que puso en jaque a un Partido Popular con mayoría absoluta en el Parlamento Español en aquellos momentos y provocaron la respuesta más coherente con el modelo ideológico de la derecha: prevenir todas aquellas conductas consideradas antisociales a través de aumentar las facilidades a los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado para atajar, controlar, disolver e impedir reuniones, manifestaciones o cualquier otro acto de protesta, ya sean sentadas, acampadas, escraches, etc. así como la expresión de ideas, opiniones y divulgación de información que no resulte “conveniente”.

El PSOE presentó un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley Mordaza cuando se encontraba en la oposición y hacía referencia a la misma de esta forma: «Se atribuye a la policía poderes fundados en meros indicios y sospechas, que desplazan las garantías Garantías Acto que proporciona a un acreedor una seguridad en el cumplimiento del compromiso del deudor. Distinguimos entre garantías reales (derecho de retención, fianza, prenda, hipoteca, privilegio) y las garantías personales (caución, aval, carta de intención, garantía autónoma). judiciales, y que adolecen de un margen enorme de discrecionalidad, lo que vulnera el artículo 24 de la Constitución [tutela judicial efectiva]».

Casi 10 años más tarde, a bordo de su tercera legislatura, la modificación de la Ley Mordaza todavía está pendiente. Se podría decir que el modelo ideológico de la derecha no estaba ni tan mal, ya que a los socialistas en el poder les ha proporcionado soluciones para sepultar a base de multas el activismo social, que se las ve y se las desea para sortear la represión a la vez que se las ingenia para pagar las durísimas sanciones y llevar a cabo los procesos judiciales. [32]

En el caso de Euskadi, Txiki señala lo siguiente: “En relación con esa ley -que el Gobierno PSOE y Unidas Podemos aún no ha derogado, aunque lo prometió- el Parlamento Vasco acordó el 22 de junio de 2016 por amplia mayoría que no fuese aplicada en la CAPV. Sin embargo, el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco -dirigido por el PNV-, hace uso de ella con total normalidad. La que fuera consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, respondía al ser interpelada por ese hecho: “Es la normativa que está en vigor”. En realidad, la dirección política de la Ertzaintza se ha esmerado en que esa legislación estatal represiva sea aplicada íntegramente. Lo de menos, también, en este caso, era lo que se votaba en el Parlamento Vasco. Lo determinante era ejecutar la legislación estatal que había sido rechazada por el Parlamento. Beltrán de Heredia es la misma consejera que se negó a mantener una reunión solicitada por ELA para conocer de primera mano, una vez aprobada la ley, qué criterios iba a utilizar su Departamento en los conflictos sociales y laborales.”
Sin comentarios.

Para terminar, este párrafo arroja un poco de esperanza reivindicando una utopía no tan lejana si nos ponemos ello con la determinación necesaria: “A todos los gobiernos se les debe recordar que son responsables de dirigir una policía democrática, al servicio del pueblo; una policía que actúe como garante de los derechos y libertades de todas las personas, especialmente de aquellas que menos tienen. ¿Una utopía? Quizás, pero merece la pena reivindicarla para evitar que el brazo de la ley que es la policía termine actuando por su cuenta, sin rendir cuentas a nadie y, en muchas ocasiones, con la protección de los propios gobiernos. En este sentido, ayudaría a la defensa de los derechos y libertades conocer los protocolos con los que actúa la policía. Todos deberían ser públicos.”

Y así, llegamos al cuarto bloque de “El Modelo Neoliberal Vasco”, de Txiki Muñoz: El hecho diferencial de una nación sin Estado.

 18 NAFARROA. La misma política con distintos partidos

En este capítulo se analizan las políticas y sus “protagonistas” en un periodo que arranca en Nafarroa en 2016. Tras perder UPN el Gobierno en 2015, el PNV ha formado parte del Gobierno de Nafarroa a través de Geroa Bai, tanto en el ejecutivo liderado por Uxue Barkos como en el que en la actualidad preside María Chivite, del PSN. Los Departamentos dirigidos por el PNV, como el de Desarrollo Económico, son clave en las relaciones con el mundo empresarial.

Como el sindicato ELA señaló cuando el partido regionalista y conservador UPN fue desplazado del Gobierno, “el cambio político y social es mucho más complejo que el cambio de partidos en los gobiernos, advirtiendo entonces que sería imposible en Nafarroa hacer una política social diferente sin modificar la política fiscal.” De momento, lo que se observa es una gestión del dinero público nada transparente, apartar a un lado que el eje de los cambios viene de la mano de la movilización social, la homologación en los contenidos de la política entre la izquierda y la derecha, la constatación de que la relación bilateral en términos de igualdad resulta imposible entre entes jerarquizados y la ausencia de cambios en las políticas presupuestarias y fiscales. En este último punto, Txiki añade este comentario: “ELA subrayaba que “la orientación de izquierda y progresista de un presupuesto necesita de decisiones de mucho mayor alcance que las presentadas. El hecho de que un presupuesto sea más o menos social lo determina su contenido, no sus firmantes”. Imanol Pascual, responsable de ELA en Nafarroa, calificó el acuerdo de la siguiente manera: a las grandes fortunas y a los lobbies empresariales y religiosos de siempre no les afecta gran cosa que ahora no gobierne UPN. El resultado es casi el mismo: la nueva política “progresista” apenas les produce molestia alguna”. Pascual advertía a la izquierda que apoyó a esas cuentas “que cuente la verdad a la gente (…) porque no todo debe parecer lo mismo”.

 19 SOBERANÍA. Gestión de un autogobierno menguante

“Hay que preguntarse si en el Estado existe un bloque histórico que, por ejemplo, asuma el derecho de las naciones sin Estado a ser sujeto político. Es obvio que con el PSOE dentro, no. En este texto se defiende que no existe, más allá del hilo argumental que cada opción política pueda plantear para tratar de reforzar su propio espacio electoral. Se defiende eso y también que, si ese bloque existiera, habría que apoyarlo sin dudarlo. Pero no existe. Dicho esto, también se afirma que no vamos a estar mejor si trasladamos a la base soberanista una hipótesis de trabajo basada en alianzas que representan una ficción.”

Como refuerzo de estas palabras, Txiki señala el siguiente editorial del diario Gara del 1 de mayo de 2022: “El soberanismo de izquierdas debe hacerse la pregunta de si existe o existirá gobierno en España con el que acordar una salida sin injerencias coercitivas a la cuestión vasca. O, dicho de otra manera, si se podrá pactar el ejercicio del derecho de autodeterminación en un proceso de diálogo normalizado. La respuesta parece bastante obvia: no lo hay ni lo habrá en mucho tiempo. Esta respuesta -continuaba- obliga a una segunda pregunta sobre si, aun así, existe capacidad de avance en cuestiones cruciales como la resolución de las consecuencias de la fase más cruenta del conflicto, la asunción de mayores cotas competenciales y la estructuración institucional o la mejora de las condiciones de vida de las personas.”

ELA ha confirmado su diagnóstico político hasta que en su XV Congreso realizó una apuesta por la independencia de Euskal Herria en forma de república. (…) la referencia del independentismo solo puede ser unilateral. Txiki

Sostiene Txiki que, para una gran parte del nacionalismo español, el PNV es la opción vasca que mejor defiende el orden establecido al renunciar a la confrontación democrática. Desde la defensa de la “estabilidad y la gobernabilidad” que defiende Urkullu no hay derecho de autodeterminación.
Así mismo, el pasado reciente se ha convertido en campo de polarización electoral, afectando al relato sobre la violencia política. El PNV elabora un discurso que no dista mucho del defendido por algunas asociaciones de víctimas. El rechazo a la violencia por parte de algunos depende de quién la practique. No digamos si ese análisis se realiza a nivel internacional. No se trata de olvidar el pasado, sino de valorar un logro mayor: el cese de la actividad armada para empezar a tratar el conflicto nacional bajo parámetros de confrontación estrictamente democrática.
Y finaliza con este párrafo: “ELA ha confirmado su diagnóstico político hasta que en su XV Congreso realizó una apuesta por la independencia de Euskal Herria en forma de república. ELA insistía en que la vía transversal no ofrece recorrido alguno a la reclamación independentista, para concluir que en la medida en que las fuerzas políticas españolas no acepten el derecho democrático del pueblo vasco a su autodeterminación, la referencia del independentismo solo puede ser unilateral.”

 20 CONFLICTO CATALÁN. Estorba cualquier confrontación democrática

“El procés clarifica muchas cosas para Cataluña y Euskal Herria. España no es ni Gran Bretaña con Escocia, ni Canadá con Quebec; solo sabe “resolver” los conflictos nacionales de forma autoritaria, negando la existencia de sujetos políticos diferentes al estatal.”

Así da comienzo el último capítulo de “El Modelo Neoliberal Vasco”, de Adolfo “Txiki” Muñoz.
El “procés” catalán [33] , con sus fortalezas y debilidades, hay algo que deja muy claro: la dificultad que supone mantener una agenda independentista compartida libre de objetivos electorales inmediatos.

“Lo que ha sucedido estos años ha enseñado a la base independentista que el Estado es bastante más que el partido del Gobierno y que trabaja con todos los medios políticos, económicos, mediáticos, judiciales, policiales, etc. a su alcance para dividir al independentismo y erradicar cualquier iniciativa política que pretenda poner en cuestión la “uniformidad” estatal.”
Si bien existe un cierto desacuerdo en el origen del proceso soberanista de Cataluña (hay quién lo sitúa en la masiva manifestación de julio de 2010 contra la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Autonomía de 2006 y quién lo hace en la manifestación independentista de la “Diada” del 11 de septiembre de 2012) lo cierto es que no es posible desvincularlo de la crisis financiera de 2008, que liquidó las cajas de ahorro catalanas, que habían apostado fuerte por el ladrillo, generando un sinfín de desahucios. El problema escaló en poco tiempo con los recortes presupuestarios exigidos por la Troika (Comisión Europea, Banco Central Banco central Entidad que, en un Estado, se encarga generalmente de la emisión de billetes de banco y del control del volumen de moneda y crédito. En España es el Banco de España quien asume dicho rol, bajo el control del Banco Central Europeo (BCE, ver más abajo).

El Banco Central de un país gestiona la política monetaria y tiene el monopolio de la emisión de la moneda nacional. Proporciona moneda a los bancos comerciales a un precio determinado por las tasas directoras, que son fijadas por el proprio banco.
Europeo y Fondo Monetario Internacional FMI
Fondo monetario internacional
El FMI nace, el mismo día que la Banca mundial, con la firma de los acuerdos de Bretton Woods. En su origen el rol del FMI era defender el nuevo sistema de cambios fijos instaurado.

A la finalisación de estos acuerdos (1971), el FMI es mantenido y se transforma paulatinamente en el gendarme y el bombero del capitalismo mundialisado : gendarme cuando impone los programas de ajuste estructural ; bombero cuando interviene financiaramente para sostener los países tocados por una crisis financiera.

Su modo de decisión es el mismo que el del Banco mundial y se basa sobre una repartición del derecho de voto en proporción a los aportes de cotisación de los países miembros. Estatutariamente es necesario el 85% de los votos para modificar la Carta del FMI (los EE.UU. poseen una minoria de bloqueo dado a que posees el 16,75 % de voces). Cinco países dominan : Los EE.UU. (16,75 %), el Japon ( 6,23 %), la Alemania (5,81%), Francia (4,29 %), y Gran Bretaña (4,29%). Los otros 177 Estados miembros estan divididos en grupos dirigidos, cada vez, por un país. El grupo más importante (6,57%) esta dirigido por Belgica. El grupo menos importante (1,55% de voces) precidido por el Gabon (países africanos).

Su capital está compuesto del aporte en divisas fuertes (y en monedas locales) de los países miembros. En función de este aporte, cada miembro se ve favorecido con Derechos Especiales de Giro (DEG) que son de hecho activos monetarios intercambiables libre e inmediatamente contra divisas de un tercer país. El uso de estos DEG corresponde a una política llamada de estabilización a corto plazo de la economía, destinada a reducir el déficit presupuestario de los países y a limitar el crecimiento de la masa monetaria. Esta estabilización constituye frecuentemente la primera fase de intervención del FMI en los países endeudados. Pero el FMI considera que en adelante es tarea suya (tras el primer choque petrolero de 1974-1975) actuar sobre la base productiva de las economías del Tercer Mundo reestructurando sus sectores internos; se trata de una política de ajuste a más largo plazo de la economía. Lo mismo sucede con los países llamados en transición hacia una economía de mercado. (Norel y Saint-Alary, 1992, p. 83).

Sitio web :
) que provocaron tres grandes huelgas generales desde 2010, la reforma del artículo 135 de la Constitución en 2011 para priorizar el pago de la deuda y la explosión social que supuso el 15M en el mismo año.

Es muy importante analizar las posiciones adoptadas por los agentes políticos, económicos y los medios de comunicación a fin de intentar neutralizar las posiciones independentistas. Desde el apoyo de la banca a la aplicación del artículo 155 [34] , relevantes medios de comunicación como los diarios El País, ABC, El Mundo y demás, cerraron filas en apoyo al Estado y su negativa en la búsqueda de una salida democrática al conflicto.

“En la coyuntura del procés hay que subrayar el papel desempeñado por los expresidentes José María Aznar y Felipe González, guardianes de las esencias nacionalistas españolas a la hora de justificar la “razón de Estado”.”

González, por su parte, posee una amplia experiencia en defender el Estado en tiempos del GAL…
Los tribunales españoles se sumaron todos a una a la posición política contra el Estatut y el procés, no había lugar para consultas, reformas constitucionales o evolución del Estado de las Autonomías, pero sí para el espionaje político a los líderes catalanes. Txiki añade estas líneas: “Para negar el debate democrático el PSOE ha utilizado una argumentación falsa ampliamente difundida por los medios españoles: son los independentistas catalanes los que imponen. No es cierto. Sólo quieren votar y que sea su pueblo -el catalán- el que decida. Si como consecuencia de esa votación los independentistas pierden, aceptan el resultado. Eso no es una imposición. Es el PSOE -y el resto de los partidos españoles- el que impone que no se vote porque no acepta que pueda perder.”

El PNV marcó distancias con el procés desde el principio: “El lehendakari Urkullu, por su parte, aparece ante los ojos del Estado como el “nacionalista bueno”, que deja atrás los tiempos de Puigdemont e Ibarretxe. Urkullu visitó a Junqueras en la cárcel y a la salida, con el lógico enfado en el independentismo, dijo que “ayudaría a encauzar el problema catalán si estuvieran fuera de la cárcel los más pragmáticos y posibilistas”. El Lehendakari pasó a ser parte, en palabras de una de las personas encarceladas, del “comité de rendición de la república catalana”.

 RECAPITULANDO

La izquierda anticapitalista, a diferencia de otros partidos y siempre según Txiki, con fuerte presencia en las bases sociales de algunos sindicatos y movimientos sociales reivindicativos, supone la verdadera alternativa al capitalismo. Finaliza su obra con una serie de puntos imprescindibles como son: valorar la naturaleza filosófica y política de la crisis que nos afecta, poner al descubierto las prácticas neoliberales del PNV, recalcar la ausencia en el debate político del análisis de la redistribución de la riqueza, la intensificación de las posturas reaccionarias de la patronal vasca y el vacío representativo en las instituciones de las reivindicaciones de las luchas alternativas, todo ello como consecuencia de la homologación entre derecha e izquierda. Para finalizar, propone una serie de temas que la izquierda está obligada a contemplar para evitar diluirse en la gestión neoliberal que la derecha propone:

  Una UE que contemple un modelo finalista y otro coyuntural, derogando el artículo 123 del Tratado
  Modificación del artículo 135 de la Constitución Española, unido a una reestructuración de la deuda pública y una auditoría en la línea propuesta por Eric Toussaint [35] , por ejemplo
  Eliminación de las guaridas fiscales
  Defensa de los servicios públicos
  Regulación pública de los mercados en manos de empresas transnacionales
  Abordar la bifurcación ecológica y energética
  Reforzar los derechos laborales erradicando el trabajo indigno
  Compromisos con el sindicalismo y los movimientos sociales que defienden posiciones alternativas

Los liderazgos políticos, sociales y sindicales solo son potentes cuando existen organizaciones reales, apoyadas en sus bases militantes, que están en condiciones de movilizar sus recursos de poder. Sin organización las propuestas alternativas son efímeras.Txiki

Para ello es imprescindible establecer la identidad política del sindicalismo, detener el autonomismo menguante a través de la confrontación democrática e insistir en: “la importancia de lo organizativo para todos aquellos proyectos políticos, sociales y sindicales que militen en las alternativas al neoliberalismo. Los resultados, en cualquier ámbito, son proporcionales al nivel de organización. Los liderazgos políticos, sociales y sindicales solo son potentes cuando existen organizaciones reales, apoyadas en sus bases militantes, que están en condiciones de movilizar sus recursos de poder. Sin organización las propuestas alternativas son efímeras, sin influencia real en la sociedad, sin capacidad de resistir a la presión política, económica y mediática a la que se ven sometidos.”

Link para acceder a la descarga del libro:
https://mrafundazioa.eus/es/centro-de-documentacion/libros/el-modelo-neoliberal-vasco


Notas

[1Adolfo “Txiki” Muñoz, El modelo neoliberal vasco, Manu Robles-Arangiz Fundazioa, Bilbao, 2024, https://mrafundazioa.eus/es/centro-de-documentacion/libros/el-modelo-neoliberal-vasco consultado el 24 junio 2025

[2Ver en https://www.bbc.com/mundo el enlace del 24 de junio de 2010, https://www.bbc.com/mundo/economia/2010/06/100623_graficos_economia_europa consultado el 24 de enero de 2025.

[3Éric Toussaint, Capitulación entre adultos. Grecia 2015: Una alternativa era posible, Editorial: El Viejo Topo, 05-05-2020, https://www.elviejotopo.com/libro/capitulacion-entre-adultos/ consultado el 24 junio 2025. Leer la reseña: Sergi Cutillas «Grecia ’Capitulación entre adultos’, una historia de Grecia no apta para Hollywood», El Salto, 13 junio 2020, https://www.elsaltodiario.com/grecia/toussaint-capitulacion-entre-adultos-historia-varoufakis-hollywood

[4Ver en https://attac.es/ el enlace de www.auditamosgrecia.org de 15 de noviembre de 2015, https://attac.es/nuevo-informe-del-comite-de-la-verdad-de-la-deuda-publica-de-grecia/ consultado el 24 de enero de 2025.

[5Leer la serie: “Comprender lo que ocurrió en Grecia en 2015 cuando la esperanza llegó desde Atenas” en 11 partes https://www.cadtm.org/Grecia-De-abril-a-junio-2015-hacia-el-desenlace-catastrofico-Parte-10 consultado el 24 junio 2025

[6Ver en https://www.elsaltodiario.com/ el enlace https://www.elsaltodiario.com/constitucion/ocho-formas-puede-afectar-articulo-135-modificado-pp-psoe de Yago Álvarez Barba, 23 de agosto de 2018. Consultado el 24 de enero de 2025.

[8Ver artículo en https://www.publico.es/ 16 de agosto de 2011 https://www.publico.es/actualidad/soluciones-pp-crisis-funcionan-gobierna.html consultado el 24 de enero de 2025.

[10Ver artículo de PACD en https://www.cadtm.org/ del 1 de julio de 20213 https://www.cadtm.org/Sabias-que-La-TROIKA consultado el 24 de enero de 2025.

[11Ver publicación «BOE» núm. 147, de 17 de junio de 2010, páginas 51662 a 51699 https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-2010-9542 consultado el 10 de febrero de 2025.

[12Ver artículo de Alicia Rodríguez de Paz en https://www.lavanguardia.com/ 19 de marzo de 2021 https://www.lavanguardia.com/economia/20210319/6602306/reforma-laboral-calvino-espana-escriva-ceoe-podemos-psoe.html consultado el 10 de febrero de 2025

[13Ver artículo de Fabián Márquez en https://www.expansion.com/ 1 de enero de 2022 https://www.expansion.com/opinion/2022/01/01/61d0acfce5fdea767e8b45b1.html consultado el 10 de febrero de 2025.

[15Ver artículo en https://historia-biografia.com/ año 2021 https://historia-biografia.com/byung-chul-han/ consultado el 10 de febrero de 2025.

[17Ver artículo de Santiago Montiveros en https://www.mendozapost.com/ 16 de mayo de 2024 https://www.mendozapost.com/economia/causas-crisis-economica-mundial-2008/ consultado el 15 de febrero de 2025.

[19Ver artículo de Carlos Hernández-Echevarría en https://www.eldiario.es/ 31 de marzo de 2019
https://www.eldiario.es/internacional/mentira-escrita-servilleta-laffer-impuestos_1_1621752.html´ revisado el 19 de febrero de 2025.

[21Ver artículo en https://www.berriozar.es/ , https://www.berriozar.es/costumbres-el-auzolan/, consultado el 5 de marzo de 2025.

[23Ver artículo de Pablo Rivas en https://www.elsaltodiario.com/ 11 de noviembre de 2024 https://www.elsaltodiario.com/cop29/cumbre-clima-baku-tierra-superara-15oc-calentamiento revisado el 7 de marzo de 2025.

[24Ver artículo de Pierre Veltz en https://shs.cairn.info/?lang=es 3 de marzo de 2022
https://doi.org/10.3917/futur.447.0005 consultado el 7 de marzo de 2025.

[25Ver artículo de Éric Toussaint y Maxime Perriot en https://www.cadtm.org/ 14 de enero de 2025 https://www.cadtm.org/Para-lograr-la-bifurcacion-ecologica-es-necesario-abandonar-las-falsas consultado el 7 de marzo de 2025.

[29Ver artículo de Juan Fernández en https://www.elperiodico.com/es/ 29 de abril de 2023 https://www.elperiodico.com/es/politica/20230429/daniel-innerarity-izquierdas-derechas-claro-86590436 consultado el 20 de marzo de 2025.

[30Ver artículo de Ana María Pascual en https://www.publico.es/ 20 de enero de 2022 https://www.publico.es/politica/caso-altsasu-rechazo-tedh-recursos-jovenes-ensombrece-victoria-social-afectados.html consultado el 24 de marzo de 20205.

[31Ver artículo de Ana María Pascual en https://www.publico.es/ 21 de julio de 2024 https://www.publico.es/politica/derechos-libertades-afecta-ley-mordaza-deroga.html consultado el 25 de marzo de 2025.

[33Ver artículo de Antonio Santamaría en https://zonaestrategia.net 5 de febrero de 2025 https://zonaestrategia.net/memoria-del-proces-independentista-catalan-i/ consultado el 28 de marzo de 2025.

[34Ver artículo en https://www.bbc.com/news 20 de octubre de 2024 https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-41498333 consultado el 29 de marzo de 2025.

[35Ver artículo de José A. Ordóñez en https://www.lne.es/asturias/ 25 de mayo de 2016 https://www.lne.es/asturias/2016/05/25/espana-necesita-auditoria-deuda-publica-19558919.html consultado el 29 de marzo de 2025.

Fernanda Gadea

Coordinadora de ATTAC España.

Otros artículos en español de Fernanda Gadea (8)

CADTM

COMITE PARA LA ABOLICION DE LA DEUDAS ILEGITIMAS

8 rue Jonfosse
4000 - Liège- Belgique

+324 56 62 56 35
info@cadtm.org

cadtm.org